Presentadores famosos
· Terelu Campos
Terelu Campos explica a David Valldeperas lo que conlleva ser famoso
El director de `Sálvame´ asegura no entender por qué su vida interesa
Carlota Corredera es un claro ejemplo de cómo una persona pasa paulatinamente de estar detrás de las cámaras a ser un personaje protagonista no sólo en su programa sino en el mundo del corazón en general. La que fuera directora de Sálvame ha sido portada ya en varias ocasiones por temas ajenos a su vida profesional pero es algo que la gallega ha sabido asimilar.
El fenómeno `Sálvame´ ha convertido en personajes públicos y de interés nacional a todos sus colaboradores y poco a poco son los directores del espacio los que están pasando a un primer plano que, parece, les ha pillado un poco desprevenidos.
David Valldeperas ha sido el último que hace unos días aseguraba asombrado que no entendía que le pudieran seguir los fotógrafos cuando él sólo era conocido por dirigir un programa. La hija de María Teresa Campos, que a estas alturas es toda una experta en lidiar con la prensa en cualquier circunstancia, le intentó hacer ver que la dirección de un programa tan popular como el de las sobremesas de la cadena insignia de Vasile tenía como consecuencia muchísima proyección y que “los cargos vienen con subcargas”.
"Yo no tengo ningún problema en que me sigan y en que me saquen, te lo aseguro, no tengo ningún problema. Lo que pasa es que yo soy conocido o popular por dirigir un programa y salgo cada tarde” dijo David, que matizó que podía entender “que a mí me sigan y me pregunten por mis colaboradores, por Terelu, por ejemplo, o algo que haya pasado en el programa, pero que me pregunten si tengo perro o dónde voy a ir de vacaciones... ¿A quién le interesa? " A lo que la colaboradora contestó con un rápido “A los millones de personas que ven Sálvame”. “La gente que nos ve, y que me ve a mí como director, le interesará cómo funciona Sálvame, o cómo me llevo con Terelu... ¡No por mi vida privada!” fue una de las últimas impresiones que compartió David, quien parece que no está dispuesto a asumir la fama como consecuencia de su trabajo.