Belén Esteban se ha tenido que armar de paciencia (un día más) con la lluvia de críticas y comentarios humillantes que le han dedicado unos desaprensivos en Instagram. La colaboradora de 'Sálvame' ha disfrutado de unos relajantes días en la costa junto a su pareja, Miguel Marcos. El buen tiempo les ha acompañado y Belén no ha dudado en hacerse fotos abandonada al 'dolce far niente' en biquini. ¡En biquini! ¡Qué osadía! A los minutos de publicar sus fotos en alta mar, ya tenía el lío montado. Porque claro, todo el mundo sabe que si no tienes las medidas perfectas no puedes exhibir tu cuerpo en ropa de baño. La lógica y la falta de empatía de los 'haters' en las redes sociales no puede ser más repugnante.
"Pareces un chorizo a punto de reventar" o "Qué estropeada estás" han sido alguna de las 'lindezas' que ha tenido que leer la de San Blas. Si quienes se dedican a hacer estas críticas tan despreciables usaran su creatividad para algo más edificante, las redes sociales y el mundo en general, definitivamente, serían más felices. Pero la neurona no les da para más que para criticar la diferencia de cuerpos, y la maravillosa y bendita imperfección.
Por si no fuera poco, también han arremetido contra ella por el mero hecho estar de vacaciones. Si es que a sus 'haters' no les parece nada bien... Suerte que Belén Estaban ya está curada de todo mal y se lo toma con buen humor. Horas antes de ponerse frente a las cámaras después de este breve y soleado asueto les ha mandado un mensajito tan refrescante como rotundo para todos ellos. "A los que me criticáis por las fotos que pongo en Instagram, un consejo: daos un bañito ja ja ja ja", ha escrito. Por el momento, la de San Blas ha disfrutado de los primeros baños de sol por todos: tanto los que la odían como los que la defienden a ultranza.