María José Campanario reconoce que de ese triángulo amoroso patrio compuesto por Jesulín, Belén Esteban y ella, ella era “la chunga”. Dice que la prensa hemos hecho de esa relación a tres bandas “una telenovela, la telenovela del pueblo”. Sin embargo, la mujer de Jesulín niega que eso sea así. Que hace tiempo que ellos hacen su vida y que Belén hace la suya. 14 años de relación la avalan. Eso y una negativa total y absoluta a escuchar lo que digan de ella –y de los otros dos personajes de este culebrón- en los medios de comunicación, que para eso tiene una abogada: para que vea los videos sin son susceptibles de demanda. Campanario, por no ver, no ve ni GH VIP y eso que la de San Blás es líder de audiencia y su imagen pública se ha visto dañada. “Es fuerte, sabrá como afrontarlo”, apunta Campanario.

 

Esta semana Belén dijo que le gustaría hablar con su ex tras salir de la casa. A Campanario eso no le incomoda. Confiesa que no se pondrá en medio, que dejará que el torero actúe como considere y que siempre tendrá Belén las puertas abiertas de su casa si así lo desea porque, empatizando con su archienemmiga, “a mi no me gustaría que el padre de mis hijos no viera a mis hijos”.  Por cierto, Campanario habla porque la dieta de la alcachofa manda.

 

Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío, también que el tiempo pone a cada uno en su lugar... Y resulta que Belén Esteban, aunque está a punto de poder ganar GH VIP, parece que ya no es tan buena... Que comienza a ser un personaje rechazado... ¿Eso te alegra?

- Teniendo en cuenta que yo tengo mi vida muy marcada hacia un punto fijo, te puedo decir que no es una cosa que me interese mucho, sinceramente. Yo no voy a decir ni una frase ni la otra. ¿Venganza? Yo no me tengo que vengar de nadie. Jamás he sido una persona rencorosa y no voy a empezar a  ahora... Creo que quien me conoce, sabe como soy y eso es lo que me sirve.

 

María José, es que durante mucho tiempo fuiste una mala de cuento...

- Te vuelvo a decir que yo sigo siendo la misma persona que hace trece años. Pero es verdad que se me ha castigado y mucho. Y muy fuerte. Y creo que he sabido aguantarlo. Ahora voy a seguir con lo que venga. Resistiendo. Venga lo que venga, voy a seguir siendo yo. Para lo bueno y para lo malo. Con mis defectos y mis virtudes.

 

Tú que has soportado tanto, qué aconsejarías a Belén cuando salga y se encuentre con esta papeleta ...

- Yo creo que es muy fuerte. Sabrá afrontarlo.

 

- ¿La ves?

Yo no veo Gran Hermano Vip

 

Pues ha dicho que querría hablar con Jesulín cuando salga de la casa. ¿Qué te parece?

-Me parece estupendo. Maravilloso

 

¿Le abrirías las puertas de tu casa?

- Siempre han estado abiertas. Cuando Belén quiera.

 

Si Belén hace ese acercamiento, ¿qué hará Jesulín?

- No estoy en la cabeza de mi marido. Quizás deberías preguntárselo a él.

 

Es que cuando existe la posibilidad de preguntárselo, él guarda silencio... Si diera un paso adelante Jesulín, tú...

- Yo le respetaría. Lo que yo piense no es que vaya a ser o no vaya a ser. Si yo hubiera dicho todo lo que he pensado durante estos trece años.... Mira, yo siempre me he mantenido muy al margen y Jesús es lo suficientemente autónomo como para pedirme opinión. Te aseguro que si marido recibe una llamada, la atendería y punto y final.

 

La piedra de toque de este asunto siempre ha sido que Jesús no ve a su hija... Tú incluso has sido crítica con eso.

- Yo lo único que te puedo decir que no me gustaría que el padre de mis hijos no viera a mis hijos. Lo he dicho siempre. Ahora, lo que yo diga a mi marido de puertas adentro me lo guardo para mí. Yo puedo tener una opinión y mi marido tener una opinión y unos motivos y ahí nos respetamos muchísimo el espacio.

 

Hoy está Jesulín contigo en Madrid, ¿la verá hoy?

- (Silencio)

 

Bueno, María José, en realidad, los extremos de este triángulo empiezan a difuminarse.... Ni tu eres tan mala, ni Belén tan princesa del pueblo...

- ¿De verdad sigues viendo un triángulo después de 13 años de casada y 14 de novia? Yo nunca he visto tal triángulo.

 

Pero no me negarás que el tiempo está siendo más justo contigo...

- Yo creo que con nuestra historia en los medios habéis tenido una telenovela, la telenovela del pueblo. Es así. Sabes que es verdad. Como una salga. Que da juego y que funciona. En donde se necesita un bueno, un malo, un feo, una guapa... Y esto no va a acabar nunca mientras haya programas y revistas. Cada uno toma las medidas o el camino que tiene que tomar.

 

Por eso te digo, telenovela del pueblo, princesa del pueblo... tu eras...

-Yo siempre he sido la chunga. He sido la mala (risas) que trabajo me ha costado (risas)

 

Te lo tomas con humor...

- Me lo tengo que tomar con humor. Si no, ¿qué hago?

 

Ahora se te creerá cuando digas que  ves a Andreíta como a tu propia hija...

- De ese tema no hablo.

 

Oye, ¿de dónde esa animadversión de Belén hacia ti?

- No lo sé.

 

¿Te gustaría llevarte mejor?

- Sí, claro que sí.

 

¿Ella ha desestabilizado tu matrimonio?

- Nunca.

 

Parece que Jesulín participará en Supervivientes. Ya has visto el doble filo que tienen los realities. Pueden ser super positivos o, de repente, mostrar cosas del personaje que lo convierten en un ser a detestar... ¿Temes que pase algo así con tu chico?

- Mi marido tiene pocos secretos en el baúl. Es natural. No hay nada más allá, salvo, eso sí, un carácter muy fuerte.

 

Perdona que cambie de tercio, pero te noto más relajada, más tranquila que en otras ocasiones...

- Es que de un tiempo a esta parte estamos más tranquilos. Nos fuimos a vivir a un sitio más tranquilo, donde no nos agobiaran, donde no nos despertáramos cada día con un cámara en la puerta de casa a las 7 de la mañana. Yo no podía ni ir a hacer la compra.

 

Precisamente por eso, eres más cercana con la prensa...

- Mi relación con la prensa nunca ha sido mala, pero dentro de la prensa que me ha rodeado, ha habido dos o tres personas que me han hecho mucho daño cuando yo he confiando mucho en ellas. Cuando empecé con mi marido hace 14 años, jamás había vendido una exclusiva, era su novia, solo su novia y tenía cámaras dentro del hospital donde trabajaba. No te digo fuera. Y yo no había dicho ni mu. Lo de que se respeta al personaje que no habla no es verdad. Yo soy la persona de este país a la que más cámaras ocultas se le han hecho.

 

Volviendo a Superviviente, con lo que le han gustado las mujeres siempre, ¿temes que tres meses en una isla le hagan arrimarse a alguna concursante?

- Mi cuñado me dice que se pasa tanto hambre que no, que no hay tu tía ni aunque quieras... (risas) Pero... Una cosa, ¿tú ya sabes que Jesús va a Supervivientes? Porque yo no lo sé...

 

Venga, va, María José...

- Te juro que yo no sé que mi marido vaya a Supervivientes. En este momento, no.

 

Porque la mujer es la última en enterarse

- (Risas) Debe de ser eso, sí. 

 

Y de la vuelta a los ruedos de Jesús, ¿qué me cuentas?

- Que nunca me ha gustado que mi marido toree porque no me gusta sufrir, pero lo voy a respetar hasta el final en todas sus decisiones. Además, es una vuelta dulce. Son pocas corridas.

 

¿No te asusta que vuelva con su afección de espalda?

- Tuvo un problema de espalda, pero me gustaría que lo vieras hacer ejercicio todos los días. Está en muy buena forma

 

Supervivientes, la alcachofa, vuelta a torear, disculpa que te pregunte, pero ¿necesitais dinero?

- Está todo muy mal (risas) Porque nunca se nos había planteado... Como hacer una peli. Llegó Santiago Segura, le ofreció Torrente y yo le dije a Jesús: por favor, por Dios, y por la Virgen, ¡hazlo! Porque a mi me gustaba mucho la idea. Ahora, Supervivientes, me contó Jesús que le habían llamado y bueno... A mí también me han llamado

 

¿Y?

- Pues que si fuera en otro momento, probablemente sí, con mis hijos más mayores...

 

¿Y con él?

- ¿Los dos? Es mucho tiempo y los niños que estén con uno o con otro ¿no?

 

Si va ¿irás a la tele a defenderlo?

- Si me lo pide, voy seguro.

 

¿Estás dispuesta? En esos programas sale todo...

- He estado bastante desconectada de todo lo que se dice. Me entero de refilón porque llegué a prohibirle a la gente de mi alrededor que me contaran cosas. No quiero saber. Que no me llamen. Que no me digan. Tengo una abogada que ve los videos y en el momento que tenga que tomar medidas, las tomo y punto.

 

Pero es tu exposición va a ser total. Ese triángulo será como el de las Bermudas

- No puedo condicionar mi vida a lo que digan los demás. Ni mi marido tampoco. ¿Toda tu vida al qué dirán? Pero obviamente, no me hará gracia estar todos los días en la tele.  Por eso, cuando pienso en Supervivientes digo:  Me gusta sí, pero todo lo que hay alrededor no.

 

Quizás ahora que tu no eres tan mala, y que si alguien se sienta en su programa a comentar el de tu marido ya no es tan buena sino que la han tildado de Bruja del pueblo...

- Eso lo dices tú. No. Yo no creo que todo eso pueda cambiar de la noche a la mañana. Pero en el caso de que fuera, esa mujer tiene su vida y su trabajo y nosotros tenemos la nuestra y nuestros trabajos. Ha llegado el momento de separar caminos... Ahora, si la prensa quiere seguir con la telenovela, adelante.

 

Hablando de telenovelas y sagas, tu hijo se ha apuntado a una escuela taurina. ¿Te gustaria que siguiera la carrera de su padre?

- Pues igual que no me gustaría que se dedicara a una profesión de riesgo como piloto de motociclismo, pero si es lo que a él le gusta y le hace feliz, le apoyaré. Yo he hecho lo que me ha hecho feliz. A los treintaitantos dije: quiero estudiar, y estudié y me puse.

 

¿Ese cambio fue duro?

- Separarme de mis hijos, porque de tu pareja, oye siempre hay formas de verte, de transmitirte el afecto, pero a mis niños, era muy dificil estar al teléfono tan sólo...

 

Eso se entendió mal, María José. Lo de que fueras a estudiar a otro país con tus hijos tan pequeños... ¿fue una escapada? ¿Algo que te sirviera para tomar distancia de manera terapéutica de tu vida de famosa?

- No te voy a decir que no. Necesitaba tener mi espacio, es cierto. Fuera de este mundo. Porque es verdad que somos personajes públicos, que unas veces te expones como hoy, que nadie me pone una pistola en la cabeza, pero otras te exponen y sí que es verdad que hubo un momento en que necesitaba centrarme en algo que fuera satisfactorio para mi, que fuera bueno, que yo ya estaba recibiendo mucha leña por todo.

 

Ya estás a punto de terminar la carrera... ¿De clínica nada?

- No, no voy a montar una clínica. Quiero hacer un máster, quiero seguir estudiando, probablemente haga el doctorado...

 

¿En qué?

- En odontopediatría o en cirugía.

 

Imagino que será divertido cuando alguien vaya al dentista y salgas tú...

- Hay mujeres de gente conocida que son profesionales como Mari Angeles Grajal, que es neumóloga. No creo que nadie vaya a echarse las manos a la cabeza cuando lleváis cinco años diciendo que estudio odontología.

 

Y esta tu tercera vez con la alcachofa... ¿No te harías una lipo y ya está?

-Una lipo si la necesitara... Yo creo que no... (risas). No, porque corro diez kilómetros al día

 

¿?

- Te enseño mi Nike plus para que lo veas... Y me daría mucha pena pegarme esa paliza y luego hacerme una lipo.

 

¿Tienes problema con el peso?

- Yo nunca he tenido problemas con el peso. Tuve un problema hormonal justo en la época en que conocía a mi marido y luego ha habido fotos que se quedarán para los restos de mi postparto, de mi embarazada... Te juro que de pequeña era un palo. 

 

Por LUIS NEMOLATO