Por MASSIMA POTENZA
Como el maná de la tierra prometida. Así es Londres para María Valverde. Si hace unos días nos enterábamos de que sus cuatros años de noviazgo con Mario Casas no es que hubieran terminado como el rosario de la Aurora, pero sí como unas escena de La cantante calva, o sea con dos desconocidos que viven en una misma casa, ahora la madrileña, visto lo que le sucede con el amor, deposita toda su ilusión en el trabajo. Y, oye, no le va nada mal. La semana pasada brindaba por la Navidad y el nuevo año con Freixenet y Bisbal y ésta, estrena superproducción americana al más puro estilo peplum de sobremesa, palomitas y muchos figurantes. Ella es Séfora el papel de Yvonne de Carlo en 'Los Diez Mandamientos' y su Charlton Heston es Christian Bale. Los dos, como estrellas de Hollywood que son, una rutilante y otra en ciernes, mostraban anoche el fruto del sudor de su frente con Exodus, la revisión del clásico firmada por Ridley Scott.
Porque si Ridley Scott y Christian Bale son ya viejos conocidos de este tipo de producciones, María Valverde dice que esta peli la tiene subidita en una “nube”. Londres, Madrid, después... Flashes internacionales para terminar un año quizás un poco aciago y comenzar otro con alegría. “Quiero que 2015 me sorprenda, estoy flexible y abierta a lo que pueda venir. Incluso tengo ganas”. Vamos, que la niña ya ha soltado lastres y está dispuesta a triunfar, que a veces no hay nada mejor que te rompan el corazón para hacerle una cirugía y de paso, propinarte tú un lifting.
María no lo necesita, la actriz está fresca como una lechuga. Con un look de Dior por Raf Simons de la colección Cruise 2014 compuesto por un top de seda estampado, una falda de talle alto en crepé negro y unos pendientes, Valverde se dejaba abrazar por el mito sexual Bale y movía su melena suelta como si no tuviera más de quince años. Bale, lo de la melena, también. Que se ha dejado el pelo largo, pero la cuerda sentimental la tiene corta a sazón de las miradas de su chica Sibi Blazic, que muy sonriente sí, pero no perdía comba de la complicidad de su marido y la española. Porque si rodando en inglés fue María Valverde la que se apoyó en Christian Bale para perfeccionar un acento, en Madrid ha sido la española la que ha echado un capote al actor británico y le ha servido de traductora en el photocall de la premiere. “Lo haría por pasar tiempo con mi familia, haría cualquier cosa por ellos”, contestó Christian Bale ante la pregunta. ¿Por quién desafiarías a un Imperio como Moisés?”. Tierno ¿no?
“Poder trabajar con alguien a quién admiras tanto, es inspirador...”. Y con piropos así de María a Bale normal lo de Blazic. Porque Valverde ahora está libre y puede decir y hacer lo que quiera. Se encuentra involucrada en el rodaje de Ahora o nunca, junto al nuevo chico de moda, Dani Rovira: “Me van a salir arrugas de tanto reírme. Con Dani estoy sacando mi lado cómico, que lo conocía poco... Esta siendo una película muy necesaria en el momento en el que estoy”, confesaba. Y en cuanto termine, otra vez rumbo a la capital británica donde dice que ha encontrado “libertad” y “muchas posibilidades”.
Siempre y cuando aún puedas pasar desapercibida. Ursula Corberó allí ya no lo es. Y no desafortunadamente por su trabajo, sino por esa vida privada de la que a ella le disgusta tanto hablar. Y es que su noviazgo desde hace meses con Andrés Velencoso, top internacional y sobre todo ex de una debilidad británica, Kylie Minoge, la convirtió en diana de las iras de la prensa más amarilla. Ahora, con la confirmación de esa relación ya tan cacareada, mejor que no se pase por las islas. Pero Úrsula, mutis, que diría Belén Esteban. Sigue pasando de puntillas y en cuanto declaraciones sobre el asunto, prefiere incluso levitar. Es decir que hasta un “Estoy bien gracias” de un casto “¿Cómo estás Ursula?” le cuesta.
La otra mujer que hizo enloquecer a los fans que se habían desplazado hasta el estreno de Exodus fue Hiba Abouk con un conjunto negro de torera y minifalda y unos stilettos fucsia.Sigue rodando el Principe pero había podido escaparse para el estreno. Ella, bueno, más bien “Fatema”, su personaje en la serie y “Bruce”, o sea, Christian Bale como Batman hicieron enloquecer a los fans porque así como Fatema o como Bruce les gritaban hastan romperse las gargantas mientras ellos pasaban el dintel de Kinépolis convertido en un templo egipcio.