De blanco, como si de una novia se tratase, apareció María Teresa Campos en la gala en la que se entregaron las Antenas de Oro, celebrada en el Casino de Aranjuez, en Madrid. Feliz -ella era una de las galardonadas- y del brazo de su pareja, Edmundo 'Bigote' Arrocet, María Teresa regalaba sonrisas a su paso. Después de unos meses muy duros por la enfermedad y el fallecimiento de su hermana Araceli, la Campos ha recuperado la sonrisa. Y buena parte de culpa la tiene Bigote, que no se separa de ella y le hace reír en todo momento.

La presentadora había tenido que abandonar antes de hora su programa '¡Qué tiempo tan feliz!' para poder llegar a tiempo al Casino de Aranjuez. "Tengo que cambiarme de ropa y sé de alguien que también tiene que cambiarse", dijo María Teresa a los telespectadores. Ese 'alguien' no era otro que Bigote, que de nuevo estaba presente en el plató como invitado, junto al actor Miki Molina y el cantante Francisco. El relevo de María Teresa lo tomó su hija Terelu, que se encargó de conducir el programa hasta el inicio de los informativos.

Iker Jiménez, con mujer, Carmen Porter. Miguel de la Quadra Salcedo

Iker Jimenez y Miguel de la Quadra Salcedo, premiados en las Antena de Oro

En el Casino de Aranjuez, María Teresa recogió su Antena de Oro como mejor presentadora. Otros premiados de la noche fueron Iker Jiménez, que llegó acompañado de su esposa Carmen Porter, el presentador de 'Zapeando' Frank Blanco, la serie 'La que se avecina', Karlos Arguiñano, entre otros. También recibieron un premio a toda su trayectoria Luis del Olmo y Miguel de la Quadra Salcedo, quien, a sus 83 años, sigue teniendo el mismo espiritu libre y aventurero de siempre, aunque su salud se lo impida. Desde hace dos años ya no puede dirigir la Ruta BBVA que él creo, pues una caída de un helicóptero le dañó los pulmones y ahora se ve obligado a ir en silla de ruedas para no cansarse y está conectado a una bombona de oxígeno.