Letizia y Sofía posan (separadas) en la tradicional misa de Pascua

Con el Rey en el centro de la imagen, las dos reinas quedan separadas, así como la princesa de Asturias, Leonor, y la infanta Sofía, cada una de ellas al lado de la imagen. Eso sí, la reina Letizia, siempre al lado de su hija mayor. Llama la atención que, por primera vez, la infanta Sofía asiste a la misa de Pascua con pantalones.

En esta ocasión, el protocolo se siguió de manera muy estricta para evitar otra bochornosa situación que jamás antes se había producido entre los miembros de la familia real española.

La reina Letizia lució un vestido camisero azul marino de estampado floral de Massimo Dutti, valorado en 79€, aunque está agotado en las tiendas. El modelo original es algo más largo y no lleva cinturón, pero la reina optó por acortar un poco la falda y ajustarlo a la cintura con el citado complemento a juego.

La princesa Leonor llevó un vestido azul claro y un abrigo de entretiempo en color crema.

La reina emérita doña Sofía eligió un traje chaqueta en color crema y un mini-bolso a juego, muy de moda esta temporada.

La lluvia hizo acto de presencia de manera intermitente, por lo que hubo momentos en los que tuvieron que protegerse bajo los paraguas.

La infanta Sofía, junto a su abuela, se mostró muy sonriente.

Dentro de la seo y antes de dar inicio la misa de Pascua, pudimos ver al rey Felipe conversando con la reina Leticia y su madres, la reina Sofía. Entre ellos, las hijas de los Reyes, Leonor y Sofía.

A la finalización de la misa de Resurrección, las hijas de los Reyes intercambiaron su posición. La princesa Leonor se colocó junto a la reina emérita Sofía y la infanta se puso junto a su madre, la reina Letizia.

El único momento en que se vio a las dos reinas juntas fue cuando ambas se dirigían al coche para regresar al palacio de Marivent. Fue un gesto de cariño y complicidad, aunque durante toda la mañana los asistentes a la misa y el público que estaba a la puerta de la catedral destacaron la frialdad con la que se trataron ambas reinas.

Esta imagen, que dio la vuelta al mundo, muestra a la reina emérita Sofía queriéndose hacer una foto con sus nietas Leonor y Sofía. La reina Letizia se interpuso entre ellas y el fotógrafo para que esa foto no se hiciera, a la vez que la princesa Leonor retira de un manotazo la mano de su abuela. El rey Felipe intenta interceder, pero el gesto quedó retratado para la posterirdad.

A la salida de la seo de Palma, doña Letizia intentó guardar las formas y disimular el incidente que se acababa de producir en el interior del templo, justo cuando se dirigían a la salida.

Nunca se supo por qué la reina Letizia se negó a esa foto de la reina emérita con sus nietas e insistió que esas fotos se tenían que hacer fuera de la iglesia. Una vez salieron del templo, pudimos ver a la reina Sofía acariciando con cariño a la princesa Leonor. Toda esta situación creó un monumental malestar dentro de la familia real, en especial por la actitud que tuvo la reina Letizia con la madre del rey Felipe.

Apenas unos días después, y con motivo de la operación a la que se tuvo que someter el rey emérito Juan Carlos, se escenificó una reconciliación que no convenció a nadie. La reina Letizia hasta le abrió la puerta del coche a la reina Sofía en señal de respeto –y fuera de todo protocolo, por cierto– y la princesa Leonor fue de la mano de su abuela hasta entrar en el centro hospitalario en el que estaba ingresado don Juan Carlos.

La última vez en que se ha podido fotografíar a toda la familia del rey al completo fue con motivo del cumpleaños de doña Sofía. Sin embargo, vuelve a llamar la atención que doña Letizia hace colocar a su hija, la princesa Leonor, a su lado y la coge de la mano. Son los dos únicos personajes de la fotografía que se dan la mano, pues el resto no lo hace.