Laura Matamoros y Benji, vacaciones de alto voltaje en Ibiza

Lo reconoce. Laura Matamoros nos tiene alucinados. Después de pasar tres meses encerrada en una isla diminuta, con hambre, arena, mosquitos y comiendo cangrejos, resulta que la it-girl ha decidido invertir sus vacaciones en otra isla. ¡Pero bueno! ¡Cómo le gusta el mar a la exsuperviviente!

Laura y Benji pasan por uno de sus mejores momentos. La pareja, pese a haber tenido que estar separada durante tres meses, está recuperando el tiempo perdido. Se dan mimitos, besitos, abracitos, ¡como si fuese el primer día! Ay, qué nos encanta ver a la gente enamorada...

Hay que reconocer que tanto Laura como Benji se gastan unos cuerpos que nos dejan fatal a todos los que no hemos conseguido superar la operación bikini. ¡Menudo físico tiene el cocinero! Deberían haberle fichado para la nueva entrega de 'Los vigilantes de la playa'.

Ya dijo Laura durante el concurso que lo suyo era para toda la vida. ¿Escuchamos campanas de boda? Nada nos gustaría más que ver a Laura vestida de novia llegando al altar del brazo de su padre. Kiko no podría contener las lágrimas, ¡y nosotros tampoco!

Laura y Benji han querido compartir estos días con algunos amigos, entre los que se encuentra el empresario Javier Hidalgo y la pareja de este -y amiga de Laura-, Sol González. Juntos se han tostado al sol mientras se divertían en la cubierta del yate.

Laura no ha podido regresar de 'Supervivientes' con la victoria debajo del brazo. Pero tampoco le fue nada mal. Quedó tercera, por detrás de Alba Carrillo y de José Luis, que, finalmente, se alzó con la victoria. Eso sí, pocos concursantes han dado más vídeos que la hija de Kiko Matamoros.

Tenemos claro que cada uno de los bañadores que lleve Laura Matamoros durante sus vacaciones se van a agotar en las tiendas. El poder de convocatoria de la exsuperviviente es enorme. Laura se ha convertido en una influencer por méritos propios y sabe perfectamente lo que se hace.

Durante el concurso, no fueron pocas las veces que Laura pidió tener algún contacto con el exterior. Finalmente, llegó en forma de llamada de Benji, su novio, aunque también costó. En el primer intento, la organización no fue capaz de contactar con él. Tuvieron que esperar otra semana para poder hacerlo.