Lejos de ocultarlo, Kiko Matamoros está muy orgulloso de la imagen que luce tras pasar por quirófano en innumerables ocasiones. Hace apenas unos días, presumía de cuerpazo a sus 65 años y es que como bien dice él mismo hasta a los más jóvenes les gustaría lucir músculos a su edad. Este jueves, se debatía sobre la moda de los retoques estéticos en el plató de 'Sálvame' y el colaborador no dudaba en revelar el arrepentimiento que arrastra desde hace años... que no es otro que no haber comenzado mucho antes.
Kiko Matamoros se ha sometido a un total de 11 operaciones estéticas: otoplastia, retoque de párpados, corrección de las bolsas de los ojos, rinoplastia, lifting facial, transplante de cejas, liposucción, marcación abdominal... y a todo esto hay que sumar las inyeccciones de botox y ácido hialurónico. "Ha merecido la pena. Estoy contento de cómo estoy", confesaba a la vez que reconocía que no le gusta nada verse en imágenes de años atrás.
"Me arrepiento de no haberme operado antes, a los 40 o así, cuando empecé a envejecer. Hasta ahí me veía bien, pero luego pegué un cambio importante de peso. Hubo un tiempo en que adelgacé mucho y la cara se me descolgó, y las orejas parecían de soplillo. También hubo momentos donde estaba más hinchado y todos esos cambios luego se notan", recordaba.
![Kiko Matamoros](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 675"%3E%3C/svg%3E)
La evolución de Kiko Matamoros tras sus retoques estéticos
No es que solo no se arrepienta de nada de lo que se ha hecho sino que además ya tiene en mente cuál será su próximo retoque: "Tengo pendiente hacerme la cicatriz que tengo, que me la quiero quitar", ha confesado.
Si algo ha querido dejar claro Kiko es que se siente muy orgulloso y feliz con su imagen actual y asegura que ni los memes ni las críticas le afecta: "Estoy muy satisfecho, pero seguiré haciéndolo si siento que lo necesito", ha concluido.