Una experta en marca personal alerta: "Amaia Montero fue la voz de toda una generación. Eso nadie lo discute. Pero su vuelta está generando más ruido que ilusión"

Hablamos con una experta en marca personal sobre todo lo que órbita alrededor de Leyre Martínez y Amaia Montero y cómo todo ello ha afectado a su marca personal, a su imagen de cara al público

Noelia Zazo
Noelia Zazo

Periodista especializada en corazón

Amaia Montero
Instagram @amaiamontero

Cuando en junio de 2024 Amaia se subió al escenario por sorpresa junto a Karol G nadie podía imaginarse que menos de un año después, todo lo que en aquel momento fue euforia, se convertiría en escepticismo.

Y es que ahora mismo no se sabe muy bien cuáles son los planes de Amaia, aunque hay una gran expectación a su alrededor y muchas personas implicadas. Su posible regreso a La Oreja de Van Gogh era para muchos un sueño, un ideal, algo que pasó de ser inalcanzable a ser posible, pero la manera en que las cosas fueron sucediendo hizo que se perdiera parte de esa magia, y ahora hay una enorme división de opiniones. 

Están quienes consideran que Montero debería volver al grupo y comenzar una nueva etapa, y hay otra gran parte de sus fans que consideran que debería relanzarse en solitario porque los cuatro integrantes que aún forman parte no hicieron las cosas por las formas en las que despidieron a Leyre Martínez tras diecisiete años juntos.

El movimiento que cambió todo en la percepción de La Oreja de Van Gogh

En octubre, y con un comunicado de cuya existencia ella no era consciente, decidieron contar al mundo que la vasca ya no continuaría siendo parte de la formación. Ese momento fue un punto de inflexión, un antes y un después. Desde entonces todo ha cambiado.

Leyre ha pasado de estar en un segundo plano, siempre escuchando a los fans de los comienzos sus ganas de que Amaia regresara y siempre replegada a lo que era lo mejor para todos en conjunto, a dar un paso al frente, lograr que se escuche su nombre y su voz y llevarse consigo a muchos, muchísimos fans, que empatizaron con ella tras el poco tacto de quienes habían sido sus compañeros.

No ha hablado demasiado al respecto, pero lo poco que ha dicho es que, aunque ahora está enfadada, los quiere. No le gustó la forma de hacer las cosas y, en muchas ocasiones, se ha sentido integrante de segunda. Pero se ha quedado ahí. Ha centrado sus fuerzas en su nueva música, su primera canción en solitario; ‘Mi nombre’ y su promoción.

Amaia, por su parte, aún no se ha pronunciado, al margen de algunas publicaciones en redes sociales que en realidad son bastante interpretables, no ha dicho una sola palabra. Pero algunas de sus acciones lo han hecho por ella, su amiga Cayetana Guillén Cuervo confirmó por error su regreso al grupo durante la celebración de los premios Thalia, y, aunque después se desdijo, el hecho de que Amaia haya cortado toda comunicación con ella tal como confirmó el periodista David Insua, tras veinte años de relación, hace pensar que efectivamente el regreso, que el mismo periodista confirmó con anterioridad, está en marcha.

"Un halo raro que en marca personal pesa"

Y ¿cómo afecta esto a la imagen de cada una? Hemos hablado de ello con Laura G. Arias, experta en Marketing y marca personal, para hacernos una idea de cómo está la situación de cada una en este momento: “Amaia Montero fue la voz de toda una generación. Eso nadie lo discute. Pero su vuelta está generando más ruido que ilusión. Lo que podía haber sido un regreso emocionante se ha llenado de un halo raro, como si faltara algo por contar… y eso, en una marca personal, pesa. En vez de emocionar, deja una sensación de duda. No se sabe muy bien a qué viene, ni en qué punto está, y todo ese misterio mal gestionado acaba alejando en vez de conectar”, explica.

“Mientras tanto, Leyre está haciendo lo que hay que hacer: mantenerse firme, sacar música nueva y hablar desde el presente. No ha buscado polémicas. No ha entrado al barro. Y, sin hacer ruido, ha brillado. Eso es marca personal: tener claro quién eres, cómo quieres comunicar y qué te hace diferente y en este momento, no sé si muy bien asesorada o de forma fortuita ella lo está haciendo muy bien, ha tomado las riendas de su carrera y parece que el momento la estaba esperando”, argumenta, con relación a los últimos movimientos de Martínez.

Leyre mantiene la calma y rehúye del victimismo

“Y si algo ha terminado de inclinar la balanza, han sido las declaraciones de Cayetana Guillén Cuervo. Aunque con buena intención, reabrieron un debate innecesario y colocaron a Leyre en una posición incómoda que no merecía. Pero incluso en ese contexto, supo mantener la calma, agradecer con elegancia y reforzar su lugar sin victimismo, algo que no es sencillo” deja claro.

Por lo que la conclusión sería que Leyre está brillando y Amaia, por el momento, nos tiene en ascuas. Pues, aunque parece evidente que su futuro pasa por ser de nuevo ‘La reina del pop’ junto a La Oreja de Van Gogh, lo cierto es que ella es quién tiene la última palabra y de momento no ha dicho ni la primera.