Enterrada en Badajoz Rosa Morena, la cantante que popularizó 'Échale guindas al pavo'

Ninguna representación institucional estuvo presente en las exequias de una mujer que llevó a Extremadura por bandera

Rosa Morena

Fue una precursora del flamenco-pop y su imagen sexy recolucionó la España de los años 70. Manuela Otilia Pulgarín, más conocida por Rosa Morena,murió en su Badajoz natal a los 78 años, víctima de un cáncer. Sin duda, su canción más popular fue la versión pop que hizo de la copla 'Échale guindas al pavo' que cantaba Imperio Argentina.

Rosa Morena fue enterrada ayer, tras un emotivo funeral en la capilla del tanatorio Puente Real de Badajoz, en el que se echo en falta la presencia de alguna autoridad oficial de la ciudad y de la comunidad autónoma. A pesar del olvido institucional, la cantante era muy querida por su público y por sus paisanos.

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Rosa benito

Era hija de un minero y formaba parte de una familia numerosa, ya que eran ocho hermanos. Comenzó a cantar siendo muy niña, con cinco años, en la radio, y con ocho ya se subió a un escenario y con doce debutó en Madrid. Siendo una adolescente de 15 años, Rosa Morena viajó a Norteamérica donde fue un fenómeno, llegando a actuar con artistas de la talla de Frank Sinatra, Dean Martin o Ella Fitzgerald. También actuó por toda Europa y Japón.

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A su regreso a España, ya en los años 70, triunfó como una cantante folclórica y sexy. En 1974 dio un concierto con sus grandes éxitos en la base militar de Alcalá de Henares (Madrid), cantando para paracaidistas a ritmo de flamenco pop, que fue emitido por TVE en el programa 'A su aire', de Chicho Ibáñez Serrador. Sus altas dosis de sensualidad desplegada entre los soldados fue muy criticada en la época. Camilo José Cela la calificó como 'la Marilyn Monroe española'.

En 1987 se retiró de la vida pública. Le detectaron un cáncer de mama que se vio agravado, al parecer, por una negligencia médica, pues llegó a afectarle a un pulmón. Tras años de tratamiento, tuvo alguna reaparición televisiva en los años 90, donde pudo comprobar que el público no la había olvidado. Badajoz, su ciudad, le dedicó una calle en 2007.

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