Ana Boyer y Fernando Verdasco vivirán con Isabel Preysler

Ana (28) y Fernando (33), han dejado el lujoso dúplex que tenían de alquiler para vivir en Puerta de Hierro. Su entorno asegura que se trata de una decisión temporal, hasta que se compren una casa propia.

Según nos han confirmado nuestras fuentes, la decisión de mudarse se ha tomado, entre otras razones, por motivos económicos. “Los gastos de la casa son muy altos y Ana y Fernando van a colaborar para pagarlos", relata esta fuente. Los gastos de mantenimiento de la exclusiva propiedad son elevados y podrían superar los 6.000 euros fijos mensuales. El pago de los sueldos de los tres empleados contratados se lleva una parte importante de la partida. 

Hace poco más de un año Ana Boyer se independizaba junto a Fernando Verdasco a un dúplez de lujo. Muchos vieron en este acto un gesto de desaprobación de Ana a su madre por su relación con Vargas Llosa, menos de un año después de la muerte de Miguel Boyer, y se habló de una posible mala relación con el escritor peruano. 

Hace ya tres décadas que Isabel Preysler vive en la propiedad conocida como 'Villa Meona', que Miguel Boyer compró en 1988 por 667.000 euros. Una casa de 2.332 metros cuadrados construidos sobre una parcela de 5.045, que alberga 13 habitaciones, 14 cuartos de baño y dos piscinas. Según ha podido saber esta redacción, antaño la casa contaba con más personal y el desembolso en salarios domésticos doblaba al actual.

Hace unas semanas la pareja anunciaba su compromiso, pero también terminaban con su mudanza a Puerta del Hierro. El tenista describía este paso en su relación como un "nuevo camino" que recorrer juntos. 

Con esta imagen y este mensaje agradecían el aluvión de palabras llenas de cariño que habían recibido tras el anuncio de su compromiso.

El hecho de que Ana siga a Fernando allí donde le toca competir refuerza la idea de que esta decisión es algo circunstancial.

La pareja se conoció durante el caluroso verano de 2013 en Ibiza y desde entonces se han hecho inseparables. Las redes sociales se han convertido en testigo de su complicidad y sus muestras de amor.

Ana Boyer decidió parar temporalmente su carrera profesional para poder acompañar a su ya futuro marido en sus competiciones por todo el mundo. Desde entonces, la hija de Isabel Preysler se ha convertido en uno de los rostros habituales en los diversos torneos.

Tamara, la hermana de Ana Boyer, fue de las primeras en felicitar a la feliz pareja tras el anuncio de su compromiso. Con una preciosa instantánea de ambos y la palabra 'love', quiso desearles lo mejor para el futuro.

La pareja no ha fijado una fecha exacta para el enlace, aunque seguro que lo tienen ya más que pensado. Igual que el vestido de la novia o la -suponemos- larguísima lista de invitados.

Al parecer, solo Ana Boyer y Fernando Verdasco pasarán por el altar. Según nos ha confirmado una amiga de Isabel Preysler, la reina de corazones no tiene intención de casarse con Mario Vargas Llosa.