Alejandra Rubio sale en defensa de su tía, Carmen Borrego, en su enfrentamiento con su hijo

"Nadie tiene derecho a separar a un nieto de su abuela", ha dicho Alejandra Rubio, que no ve justo que su primo, José María Almoguera, haya roto relaciones con su madre

Montse Jolis
Montse Jolis

Periodista especializada en corazón y sociedad

Alejandra Rubio
INSTAGRAM @alerubioc

Alejandra Rubio (22 años) no ha dudado en sacar la cara por su tía Carmen Borrego (56 años), a la que ha defendido públicamente a los desplantes que le está haciendo su hijo, José María Almoguera (33 años), con el que lleva meses distanciada. La gran preocupación de Carmen Borrego es que su hijo y su nuera, Paola Olmedo (34 años), no le permitan conocer a su nieto. Alejandra no termina de entender la actitud de su primo José María con la hermana de su madre. "Nunca habían estado sin hablarse tanto tiempo. Nadie tiene derecho a separar a un nieto de su abuela", ha dicho Alejandra Rubio en 'Fiesta', el programa en el que colabora. Alejandra ha comentado que su tía "es buena madre" y confía en que todo se soluciones cuando nazca el bebé.

Carmen y su hijo no se hablan, concretamente, desde octubre, cuando Paola fue pillada en unos audios poniendo a caldo a la familia Campos. A Carmen Borrego esas opiniones no le gustaron un pelo y contestó desde el programa en el que colabora con unas tajantes y duras declaraciones. José María se puso del lado de su mujer y desaprobó los reproches que su madre le hizo a su mujer de manera pública.

El primer bisnieto de Teresa Campos

Por si esto no fuera suficiente, Carmen anunció a bombo y platillo que iba a ser abuela por primera vez, porque Paola y José María estaban esperando su primer hijo en común –Paola es madre de un niño nacido de una relación anterior–, un bebé que a Carmen Borrego le hace muchísima ilusión porque, además, será el primer bisnieto de María Teresa Campos. Que Carmen hiciera ese anuncio sin contar con su hijo y su nuera enfadó aún más al matrimonio. A raíz de esto, las relaciones entre madre e hijo empeoraron aún más.

Posteriormente, Carmen Borrego se temió lo peor. "Oye, a ver si yo me enfado con Paola y al final no voy a poder ver a mi nieto. Yo sé que Paola eso no me lo va a hacer, porque además mi hijo no se lo consentiría", confesaba en las páginas de la revista Lecturas.