Anna Ferrer Padilla lo explicaba perfectamente hace unos días, “igual que voy al dentista para tener una boca sana, también voy al psicólogo para tener paz y orden mental”. La nueva generación de hijas de famosas no tienen ningún problema en hablar de por qué acuden a terapia y apuestan por normalizar las visitas periódicas a los psicólogos. La última en hacerlo ha sido Alejandra Rubio, hija de Terelu.
“Siempre he tenido un problema con mi mala leche. Todo el mundo que me rodea lo sabe. Hubo una época en la que me enfadaba por todo, todo me parecía mal y horrible. Esto me generaba un problema en vida porque siempre estaba de mala leche y decidí ir al psicólogo”, dice con naturalidad. La hija del óptico y la presentadora ha compartido lo más valioso que aprendió en esa época de terapia, “cuando me enfadaba, lo que hacía era preguntarme ‘¿para qué me enfado?’ en vez de ‘¿por qué me estoy enfadando?”, así, asegura aprendió a controlar su fortísimo temperamento. “Mi carácter es para toda la vida, pero puedo aprender a gestionarlo”.
Rubio, con este vídeo y su sinceridad, pretende destigmatizar el acudir a terapia, cuando para ella es algo esencial “pues te da consejos objetivamente”. Además, asegura que nadie le recomendó que fuera, sino que lo decidió por sí misma, “no me lo dijeron mis padres, fui yo misma la que dije un día ‘creo que necesito un psicólogo’, y fui’”.