Ágatha Ruiz de la Prada le pone una sonrisa a su nueva vida

La diseñadora se ha dejado ver irradiando felicidad en uno de sus desfiles en Viña del Mar

El 2016 fue un mal año para Ágatha Ruiz de la Prada. Fue el año en el que moría definitivamente el amor que unía a la diseñadora con el periodista Pedro J. Ramírez. Un amor de tres décadas que se vio truncado cuando el corazón de Pedro J. empezó a latir en otra dirección, por otra mujer. Pero el 2016 ya ha quedado atrás y Ágatha no está dispuesta a hundirse por la ruptura.

La diseñadora ha decidido no mirar atrás y seguir caminando hacia delante con una sonrisa, siendo su trabajo uno de los mejores aliados para conseguirlo. Y precisamente por trabajo hemos podido verla en su última aparición pública. Ágatha ha viajado hasta Chile para recoger la medalla de la Ilustre Municipalidad de Viña del Mar y para presentar su última colección de ropa.

Como siempre, los colores vivos y los diseños atrevidos marcaron la esencia de todo el desfile, demostrando que no su imaginación y su estilo no han sufrido ningún cambio a pesar del vaivén emocional. Durante la presentación, la diseñadora se mostró muy concentrada y con semblante serio, visiblemente enfocada en su trabajo.

Sin embargo, al final del desfile y ya alejada de la inevitable presión del momento, su sonrisa no dejaba lugar a dudas: Ágatha Ruiz de la Prada ha dejado atrás la oscuridad del desamor y vuelve a abrirse paso entre el colorido camino que tanto le gusta lucir y mostrar. Los presentes pudieron ver a una mujer rejuvenecida y feliz, muy alejada ya del golpe de la ruptura.