Sebastián Yatra visita 'El Hormiguero': del curioso origen de su nombre artístico a su lista de conquistas

Como le sucede a muchos otros artistas, Sebastián Yatra (30 años) supo que quería dedicarse a la música desde pequeño. Su familia se convirtió en su gran apoyo. Le apuntaron a clases de guitarra y canto para que se formase. También le alentaron en cada ocasión que pudieron para que cumpliese su sueño. Sabían del talento que tenía y no se equivocaron. Hoy es uno de los artistas más importantes del panorama mundial.

Este lunes acude a ‘El Hormiguero’ para presentar el que será su próximo trabajo. 'Milagro' saldrá a la venta el próximo 16 de mayo. Con él, intentará repitir el mismo éxito que con sus anteriores discos, con los que ha sido nominado en reiteradas ocasiones en los Grammys latinos y con los que se ha posicionado en uno de los cantantes más escuchados de las playlists.

Nació en Medellín, Colombia, y vivió hasta los cinco años en Cartagena. Cuando aún era un niño, se mudó junto a su familia a Estados Unidos. No tuvo una adolescencia fácil. Le diagnosticaron nódulos en las cuerdas vocales. "Yo, a los 14 años, fui a Halloween Horror Nights… y grité, pero como un loco. Me quedé sin voz como dos meses, me rompí la garganta", contó el artista en una entrevista en 'Algo Personal con Jorge Ramos'. Le aseguraron que no volvería a cantar. Por suerte para muchos (y gracias a su empeño), se equivocaron con el diagnóstico. 

El verdadero nombre del cantante y por qué se llama Sebastián Yatra

El despegue de su carrera llegó en 2014 cuando lanzó al mercado 'El psicólogo', su primer sencillo. Consiguió colocarse en el número tres de la lista de lo más escuchado en Colombia y el número uno en Venezuela y Ecuador. Siguió trabajando y el 2016 llegó lo que se puede decir que fue su primer gran hit, 'Traicionera'. 

Universal ya le había echado el ojo. Quería ficharlo y convertirlo en un artista de renombre para que siguiese sacando nuevas canciones bajo su sello. Eso sí, para el cantante es muy importante que sus temas aporten felicidad a aquellos que las escuchen. Prueba de ello es su nombre artístico. El nombre real del colombiano es Sebastián Obando Giraldo, pero se lo cambió por Yatra. Esta palabra en hindú significa "camino sagrado y divino". La eligió como símbolo de entrega a la búsqueda de lo que le hace feliz y ser solidario con aquellos que lo necesitan.

Los amoríos de Sebastián Yatra

En lo personal y muy a su pesar, Sebastián Yatra ocupa casi más titulares por sus amoríos que por sus éxitos profesionales. Hasta el momento solo ha estado enamorado de dos mujeres en su vida: las cantantes Tini Stoessel y Aitana Ocaña. "Estas dos relaciones han sido más amor, mutuo, donde me siento bien y ha sido muy bonito", confesaba en una entrevista en el podcast ‘A solas con…’ de Vicky Martín Berrocal.

No ha tenido fortuna. Nunca ha tenido una relación que dure más de un año: "Ese ha sido mi tope, pero me pasa que digo: 'Si yo tuviese una relación más tiempo, me darían ganas de ser infiel aunque esté enamorado de alguien'".

Aunque cree en el amor, su concepto de relación es más abierto. "Uno está en una relación y te empiezas a limitar muchísimo, sales menos de fiesta para evitar que te guste alguien. Yo sí, en este momento de mi vida con el tipo de vida que tengo, tengo una forma más abierta de pensarlo y no veo descabellado tener en algún momento de mi vida una relación más abierta a lo que estamos acostumbrados", le contó a Berrocal. Cree que la sociedad está muy volcada en ser fiel y no en la felicidad, algo que para él es muy importante.

A quien adora es a su familia. Su padre se lo dio todo, pero siente verdadero amor por su madre: "Mi mamá es el núcleo de mi familia. Ella se obsesionó también con esto de la música desde que tenía 12 años, entonces ella y yo ya hablábamos de que quería ser cantante. Pienso que tuve éxito por esa combinación tan específica entre mi madre y yo. Tuve la fortuna de tener una mamá como ella, mi mamá es la que nos ha ayudado a cada uno a sacar adelante nuestros proyectos. Es una crack", decía.