Álvaro Muñoz Escassi está en boca de todos. Hace unas semanas era el centro de atención por llegar a la final de 'Supervivientes 2025', junto a Borja, Montoya y Anita. Después de mucho esfuerzo, el jinete demostró por última vez su habilidad y que era merecedor de alzarse con el premio. De hecho, quedó en segundo lugar. Acompañándolo en esta última etapa de la aventura estaban Sheila Casas, Lara Dibildos y sus hijos, Álvaro y Anna.
De esas cuatro personas, una ya no está en la vida de Álvaro. Sheila Casas y el jinete rompían su relación el pasado viernes con un comunicado en redes sociales. "Queremos comunicar que hemos decidido poner fin a nuestra relación. Ha sido una etapa bonita que recordaremos con cariño, pero creemos que es lo mejor para ambos en este momento. Os agradecemos todo el apoyo. Sheila & Álvaro", expresaron.
Desde entonces, las preguntas y la atención mediática se ha multiplicado para ambos. En estos momentos tan difíciles, Álvaro se refugia en sus dos hijos. "Que me gusta pasar tiempo con vosotros", publicó hace dos semanas Escassi con fotos tiernas de sus retoños. Aunque su padre es uno de los rostros más conocidos del panorama social, los dos jóvenes se han mantenido alejados del foco mediático.
Instagram @alvaroescassioficial
El pasado 17 de junio, durante la final de 'Supervivientes 2025', han roto con su regla de oro para mostrar todo su apoyo a su padre. La mayor de los dos es Anna Barrachina. La historia de esta joven es una de las más recordadas de la historia del corazón.
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Fue en 2015 cuando se descubrió un secreto que Álvaro mantenía guardado bajo llave: tenía una hija secreta. Al principio, todos pensamos que se trataba de una joven amante del jugador de polo. Pero más tarde se supo la verdad. Anna era fruto de la relación del jinete con Mercedes Barrachina. Un romance que llamó la atención porque ella estaba casada y tenia trece años más que él.
Anna Barrachina, el gran apoyo de su padre
Para evitar especulaciones y rebajar la atención mediática, Escassi dio un paso al frente y reconoció su paternidad. "Yo sabiendo que ella era mi hija, ella pensando que yo era su padrino. Era un sufrimiento, yo no lo soportaba”, expuso hace algún tiempo. Desde entonces, padre e hija empezaron a verse con más frecuencia. Planes juntos, vacaciones idílicas y tiempo para conocerse mejor. Poco a poco, lograron forjar una relación que a día de hoy está más que consolidada.
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Un claro ejemplo de ello es que padre e hija aprovechan cualquier hueco para hacer planes y disfrutar de la compañía del otro, así como de apoyarse mutuamente en sus mejores y peores momentos. Comidas los dos solos, acompañamiento en situaciones complejas y preciosas dedicatorias en redes sociales demuestran que padre e hija se llevan a las mil maravillas.
"Cuando lo que más quieres está contigo. Tu también lo has estado sin tener que hacerlo", escribía el jinete junto a una foto con su primogénita. Una instantánea publicada durante una época un tanto polémica. Escassi acababa de romper con María José Suárez tras salir a la luz que le había sido infiel.
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Más recientemente, sin ningún motivo en especial, Álvaro reiteraba lo unido que estaba a su hija. "Y esta niña tan bonita… Como te admiro en todo lo que hace en tu vida. Que suerte ser tu padre. Gracias", expresaba. La joven no ha dudado en reaccionar a estos halagos de su padre, pero sin atraer la fama hacia ella. Anna se encuentra volcada en su vocación como artista, tal como reflejan las exposiciones y obras que publica en sus redes.