Un inesperado hallazgo en Huéscar, Andalucía, mantiene en vilo a la localidad. Ha pasado un año desde que un vecino que frecuenta la sima de Carrascal encontraba varios restos óseos. Las especulaciones desde entonces no dejan de crecer. Las autoridades han señalado que podría tratarse de una menor desaparecida el 20 de octubre de 1983, aunque los análisis pendientes de ADN todavía tienen que confirmarlo.
Las autoridades sospechan que podría tratarse de una menor desaparecida hace 42 años
Era en diciembre de 2023 cuando un pastor se encontraba, por casualidad, con unos restos óseos humanos en la Sima del Carrascal. El hombre no dudó en llamar a las autoridades y a un grupo de espeleólogos para analizar el insólito hallazgo. La inspección de los huesos ha contado también con el trabajo de la Asociación Espeleológica Velezana por la complicada geografía del lugar. Aunque todavía se desconoce a quién pertenecen estos huesos, los expertos han llegado a una conclusión clave. Al parecer, corresponden a un menor de edad de entre 9 y 11 años.
Además, algunos de ellos podrían ser también de una persona adulta. Este es otro de los frentes abiertos que investigan las autoridades en busca de respuestas. "Está determinado, por toda la trazabilidad que se ha hecho desde el punto de vista genético, que estamos ante los huesos de una menor, una niña, y por otro lado de unos huesos pertenecientes a una mujer adulta. Eso es así", ha asegurado el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández a los medios locales.
Desde el insólito hallazgo, la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación y trata de esclarecer a quién corresponden estos restos que pueden llevar en el lugar casi cinco décadas. Los huesos están siendo investigados desde entonces en el Instituto de Medicina Legal. Las autoridades que trabajan en el caso tienen sus sospechas. Las primeras hipótesis señalan que podría tratarse de una menor de 10 años desaparecida en Cúllar el 30 de octubre de 1983. Su caso hizo mella en la localidad. 42 años después, el misterio todavía no ha sido desaparecido. Las autoridades creen que este hallazgo podría tener algún tipo de relación con la desaparición de la menor cuyo fallecimiento fue declarado en 2010.
El paradero de la menor es uno de los mayores misterios de Cúllar
La investigación sobre la desaparición de la niña no consiguió dar con su paradero. Tampoco se encontraron pistas determinantes que esclarecieran qué le ocurrió a la pequeña de solo 10 años. Ante la falta de noticias, se declaró la muerte de la menor. Fueron sus propios hermanos quienes solicitaron al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Baza que se llevara a cabo tal procedimiento y así fue. La administración competente llevó a cabo el proceso y declaraba la muerte de la menor el 23 de febrero de ese mismo año.
A pesar de todo, la desaparición de la menor que se produjo durante las fiestas locales es todavía una gran incógnita. La especulación entre algunos de los vecinos de la zona tampoco ha cesado desde entonces. Son décadas de incertidumbre las que arrastra la familia de la pequeña que no ha podido lidiar con un duelo en condiciones. Algunos vecinos creen que podría tratarse de un crimen mientras que otros hablan de una fatídica desaparición sin delito. Por su parte, la familia ha sospechado siempre que la menor podría haber sido secuestrada. Si esta fuese la posibilidad, su atacante también podría haber fallecido ya. Son demasiadas las incógnitas que se encuentran abiertas tras este caso 42 años después.
La investigación sorbe los restos óseos que podrían pertenecer a la menor sigue adelante. Aunque ha pasado un año desde que se produjo el hallazgo, todavía no se han esclarecido los resultados de las pruebas de ADN llevadas a cabo por los expertos. Aun así, todo señala que las autoridades podrían estar ahora más cerca que nunca de poner fin a uno de los grandes enigmas de Cúllar.
