Tengo un edema de Reinke, una inflamación de las cuerdas vocales

A. Garófano

Terelu Campos

Presentadora, colaboradora televisiva, bloguera y actriz

27 de abril de 2022, 09:40

Volver

Estos días están siendo difíciles en cuanto a la salud. El lunes empecé a notarme que no estoy bien de la garganta y de la voz. Cada vez que vamos a salir al plató nos hacemos la prueba de la covid porque es obligatoria. En ese aspecto estoy tranquila, porque sé que no es eso. Fui al otorrino porque me resiento mucho del oído y me llevé una regañina por estar muchos años sin ir. Tengo un edema de Reinke, lo que viene siendo una inflamación de las cuerdas vocales, desde hace seis años.

Me siento impotente

Sufro este edema por el mal uso a la hora de hablar y nunca os lo he contado, pero estoy operada de una cuerda desde hace más de 30 años. No puedo hablar en alto en público y donde haya ruido, ya que el edema que tengo es severo. Eso me demuestra que he vuelto a la vida normal antes de la covid, cuando iba a la discoteca y me quedaba sin voz porque hablaba más. Dos años y pico después todo ha vuelto a la rutina. La humedad de Málaga lleva matándome mucho tiempo. Hace muchos años empecé a notar que la Semana Santa me producía una afonía. No deja de asustarme, pues la garganta en mi familia ha sido un punto complicado y peligroso por los cánceres de mi madre y de sus dos hermanos mayores, así que no debo jugar con esas cosas, pero vivo la vida sin pensar lo que me puede ocurrir porque me han ocurrido ya muchas cosas. No voy a decir demasiado porque todavía la vida te sorprende con más. El jueves pasado presenté ‘Sálvame’ en unas condiciones deplorables. Jamás en mi vida me he sentido tan impotente ante cuatro horas de directo y lo pasé mal. Os parecerá absurdo, pero no poder hablar me provoca claustrofobia. En mis treinta y tantos años de carrera tuve que decir horas antes que no podía presentar el programa que hago en Telemadrid. Quiero dar las gracias a la cadena y a la dirección de ‘Juntos el debate’ por su comprensión. Saben que soy una cumplidora fiel de mi trabajo. Eso me provoca desasosiego, ya que no estoy acostumbrada y no me ha pasado en la vida tener que dejar el trabajo tan solo unas horas antes. La vida te baja a la realidad y te dice lo que puedes o no hacer. Medicada hasta las trancas e inyectada de Urbason, empecé a recuperar la voz el viernes. Ya estoy más tranquila y pude presentar el programa. Tengo que cuidarme la voz porque aún me duele y me molesta.

Rechazar y suscribirse

Si quieres actualizar tus preferencias de consentimiento haz click en el siguiente enlace