Me llaman compañeros para preguntarme por la vida privada de Jordi González, sabiendo que he trabajado muchos años y muchos programas a su lado. Y les contesto con sinceridad ¡no sé nada! Hasta tal punto es hermético con sus cosas nuestro Jordi que voy a contar una anécdota reveladora difícil de creer ¡pero es cierta! Llevaba yo dos años colaborando en su exitoso 'Vitamina N' en la cadena local de La Vanguardia, y el simpático productor del programa, un chico llamado Xavi, me confesó emocionado, “el mes que viene me caso, Pilar”. Le felicité, le regalé una yogurtera, seguimos, y un día Jordi me advierte que vamos a grabar el programa del viernes en lugar de hacerlo en directo, porque debe acudir a la boda de su hermano. Yo le solté, “qué casualidad, todo el mundo se casa, el productor también”, y Jordi me aclaró, “sí, es que Xavi es mi hermano”. ¡Dos años trabajando con ellos, codo con codo, y ninguno de los dos me lo había dicho!