Tamara Gorro muestra su cuerpo sin filtros tras su operación: "Me valoro y me quiero"

4 de noviembre de 2020, 21:53

Tamara Gorro ha pasado unos días complicados tras tener que ser intervenida de un tumor benigno. La influencer nos dejaba muy preocupados después de que su marido, Ezequiel Garay, anunciara que había pasado por quirófano tras sufrir fuertes dolores en los ovarios. Afortunadamente, Tamara Gorro se encuentra bien físicamente y todo ha ido de maravilla, un pequeño susto que le ha valido a la colaboradora para sacar una conclusión.

Lo ha hecho en Instagram, donde ha vuelto con fuerza tras su operación. Tamara no ha ocultado nada a todos sus seguidores en estos días y haciendo alarde, una vez más, de su naturalidad ha ido mostrando las secuelas que su paso por quirófano han dejado en su cuerpo. Sobre todo, una evidente inflamación abdominal que poco a poco va bajando.

"Voy a ser muy clara. ¿Qué quiero transmitir con estas fotos? En la primera, la persona quiere disimular el hinchazón de su tripa, sintiéndose bonita. En la segunda, la persona muestra su hinchazón sin pudor, sintiéndose bonita. En la tercera, soy yo, Tamara Gorro. Una persona que siempre ha tenido un abdomen muy definido debido a mi pasión por el deporte y comida saludable", ha empezado escribiendo Tamara Gorro junto a un carrusel de fotografías en las que aparece con ropa interior y mostrando su cuerpo sin filtros en distintas poses.

"Yo me decanto por la segunda opción: mostrar sin pudor y aceptar lo que hay. Me acepto, me gusto, me valoro y me quiero. Las dos opciones me parecen lícitas, cada uno elige cómo quiere verse. Pero aún eligiendo la primera , hay que tener en cuenta una cosa muy importante: La perfección no está en la medida y cuerpo perfecto. Está en lo mucho que uno se quiera y acepte".

Tamara Gorro ha mostrado su figura de la forma más natural y real enviando un mensaje de empoderamiento y aceptación en cada momento de nuestras vidas. Un aprendizaje que siempre ha tenido presente pero tras pasar por quirófano más que nunca.