Susana Molina habla de la fuerte ansiedad que sufre desde hace años

"Me di cuenta que Gonzalo me estaba ocultando información porque estaba muy nervioso. Me dejaron ingresada y después de mucho insistir me contaron que había convulsionado, me había meado encima, me tuvieron que sacar la lengua...". Afortunadamente, las pruebas salieron bien y todo se quedó en un susto ocasionado por una bajada drástica de tensión. 

"Empecé a tener miedo a conducir, no podía ducharme sola, ir de compras... Sentía que todo el rato me iba a pasar", explicaba recordando esos difíciles momentos que compartió a través de su perfil de Instagram. 

Tal y como ella manifestaba, empezó a hablar de sus síntomas hasta que descubrió que padecía ansiedad. Su error fue no atajarlo cuanto antes: "Como siempre estaba con Gonzalo, empecé a integrar esa sensación en mi vida". Una decisión completamente errónea de la que se dio cuenta meses después al comenzar una nueva vida en solitario. 

"Ya no tenía a mi lado a Gonzalo para tranquilizarme", explicaba. Los síntomas empezaron a ser más importantes hasta que llegó el punto que dio un golpe en la mesa: "Vivir sola me ha ayudado mucho pero aunque ahora estoy mejor voy a empezar a tratarme porque no hay por qué vivir con ansiedad". Finalmente, Susana, que se encuentra mucho mejor aunque le cuesta viajar sola y coger el coche, ha aconsejado a todo el mundo a no dejarlo pasar.