El plató de 'Sálvame' no podía creerse el fuego violento y repentino que se ha generado entre Mila Ximénez y María Patiño. La primera ha acabado abandonando el plató enfadadísima, dejando a su compañera con los ojos vidriosos y arrepentida. ¿Estamos asistiendo al fin de su amistad?

El programa se encontraba debatiendo sobre la controvertida separación entre Makoke y Kiko Matamoros. Mila ofrecía una reconstrucción sobre una de las infidelidades de su compañero, cuando María la ha cortado y ha desmentido su información. Una actitud que ha enfadado muchísimo a la colaboradora, que ha intentado contener sus emociones, pero al final han explotado como un volcán. "Te lo digo desde el cariño, pero no me vuelvas a desmentir una información", le decía Ximénez a Patiño. Cada palabra con el que le daba vueltas al tema, iba erosionando poco a poco la presa de contención en sus sentimientos, hasta que ya no ha podido más y ha estallado contra su amiga: "Me molesta que, a quien yo respeto, no me respete a mí ni a las informaciones que doy. Lo que has hecho es una falta absoluta de compañerismo y lo primero es el respeto".

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Su sola presencia la irritaba sobre manera, y Mila optaba por abandonar su sitio, pegado al de Patiño. Jorge Javier Vázquez intentaba ir al meollo de la pelea que se había desatado. No en vano, y dado el enfado monumental de Ximénez, todo sugería que algo llevaba tiempo provocando un escozor entre ambas. La tertuliana se desahogaba con el presentador: "María, a veces, es muy poco generosa con sus compañeros, porque no deja hablar ni a Dios. Es como el 'sheriff' de la noticia, siempre la información buena tiene que estar en su boca. Pues estoy harta". Asimismo, dejaba caer que el resto de compañeros no solo creen lo que ella estaba afirmando, sino que "ponen verde" a la presentadora de 'Socialité' a sus espaldas.

María no sabía cómo reaccionar, pues no había sido consciente de que su actitud pudiera haber irritado hasta ese extremo a Mila, que decidía quitarse la petaca del micro y salir de plató a airearse y a calmarse. Jorge abordaba a Patiño y le tomaba el pulso. La periodista, visiblemente emocionada y afectada, conseguía articular palabra y, en un ejercicio de autocrítica, y reconocía sentirse arrepentida por haber hecho sentir de esa forma a Mila: "Supongo que tendré que hacer autocrítica y mejorar en ese sentido por el bien de todos. Pero no me considero mala compañera. No me cuesta nada pedir perdón y tengo una forma de defender la información que a veces me ciega, y tendré que ser más consciente de ello".