Rocío Carrasco da la espalda a su tía Rosa Benito por su papel en la apertura del testamento de Rocío Jurado

"Nos llama a todos y nos dice que estemos en casa de mi madre y fuimos mi tía Gloria y su marido, Amador y su mujer, José Ortega Cano, la albacea y yo", ha recordado.

Rocío Carrasco, muy directa, ha contado que en ese momento estaban todos los que tenían que estar pero ha matizado, tajante, "Bueno... Tampoco los que tenían que estar, porque teníamos que estar su hermano (Amador), su hermana (Gloria), su marido (José Otega Cano) y yo. A mis tíos les deja unas fincas y mí me deja de heredera universal", ha explicado dejando muy claro que en ese momento tan importante le sobrara su tía Rosa Benito y su tío José Antonio, marido de Gloria Mohedano.

La hija de Rocío Jurado ha lamentado que desde ese día la familia se rompe. "Yo no sabía lo que mi madre quería ni nunca me interesó. A partir de ese día todo termina explotando, cada uno por un sitio. Algunos juntos y otros por nuestro camino, y al final lo que hacen es unirse a la persona que más daño ha hecho a su hermana en vida, a su mujer, a su sobrina y a la hija de tu mujer", ha dicho recriminando la actitud no solo de sus tíos sino también de José Ortega Cano.

Rocío Carrasco lamenta que su familia, después de que se conociera que ella era la heredera universal de Rocío Jurado, se volcaran con Antonio David Flores. 

"El que va fardando de que mi madre le querían mucho... La tenían que matar antes para que viera un duro de ella", ha dicho explicando por qué Rocío Jurado no dejó nada a sus nietos en su herencia.