El corte de mangas que Manel Navarro le dedicó a sus detractores durante la última gala de 'Objetivo Eurovisión' forma parte ya de la larga lista de polémicas eurovisivas. Una lista en la que este año también hemos tenido que sumar el cambio de última hora en el sistema de votación del candidato, la lamentable agresión a Xavi Martínez o los fuertes abucheos que se escucharon durante varios momentos de la retransmisión.
Pero aunque parezca que este año la elección del representante español se ha llevado la palma en cuanto a #eurodrama se refiere hay que recordar que antes hubo muchas otras polémicas. Los encargados de refrescarnos la memoria han sido los miembros de la RAE. Un año más han criticado que la canción que llevamos al festival tenga partes en inglés. Algo que nos ha hecho recordar la que se montó el año pasado cuando Barei decidió interpretar su tema íntegramente en inglés.
El año 2014 también tuvo su polémica: la de Brequette. La cantante aspiraba a representar España con un tema que los tuiteros pronto se encargaron de señalar como "plagio". No sabemos si fue por eso pero lo cierto es que Brequette tuvo que decir adiós a su sueño y ver como Ruth Lorenzo viajaba a Copenhague. También es verdad que la pobre se lo tomó bien, no como John Cobra. Si el corte de mangas de Manel Navarro os ha parecido fuerte es porque ya no os acordáis de la que lió el cantante cuando fue abucheado en la gala de pre selección del año 2010. Ante los gritos y silbidos Cobra no dudó en invitar a los allí presentes a que le regalaran una sesión de sexo oral (dicho en otras palabras, claro).
La retransmisión de las pre selecciones ha resultado ser una mina de oro para los amantes de la polémica. Aunque los follones por el candidato empezaron mucho antes. Incluso la edición de Massiel, aquella en la que España se coronó como ganadora de Eurovisión, también tuvo su movida. Aquel año (1968) el representante español iba a ser, en realidad, Joan Manuel Serrat y no Massiel. Pero dos semanas antes de que se celebrara el Festival, Serrat declaró que cantaría en catalán y el gobierno franquista decidió apartarlo del certamen y enviar a Massiel. La jugada les salió bien pero no estuvo exenta de polémica.