Las Navidades que están pasando este año Shakira y Gerard Piqué están siendo diferentes a las anteriores. El Caga Tió lo han sustituido por el Santa Claus con más acento americano, pues toda la familia Piqué Mebarak ha pasado las fiestas en Nueva York.

Los cuatro integrantes de esta familia ponía rumbo a la ciudad de los rascacielos una vez hubo acabado Gerard sus compromisos laborales. El sábado, el rubio disputaba el tradicional Clásico contra el Real Madrid. Tras el triunfo del equipo azul grana, a Gerard le esperaba un planazo perfecto para celebrar la victoria y la Navidad, una escapada a Nueva York. La familia llegaba el 24 a la ciudad estadounidense justo a tiempo para recibir a Santa en casa y para hacer galletitas de jengibre. Un verdadero plan de cuento. Y tras una estampa tan hogareña y perfecta, ¡vuelta al mundo del derporte! Al baloncesto en esta ocasión, otra actividad que les encanta tanto a Piqué como a Milan. Padre e hijo acostumbran a ir a partidos en Barcelona y en N.Y. tampoco querían perderse la oportunidad de disfrutar de un enfretamiento deportivo con entradas a pie de pista. Podían tocar con sus dedos a los jugadores.

Este viajazo llega en un punto en el que Shakira y Gerard han tenido que hacer frente a numerosos rumores que aseguraban que su pareja estaba en crisis. Cuando muchos ya las deban por ‘separados’, los dos nos dejan sus imágenes más cómplices y familiares.

Pero lo que de verdad tiene preocupados a los fans de la artista de Barranquilla es la voz de su ídolo. Shakira ha tenido que cancelar el inicio de su gira debido a una complicada afección en las cuerdas vocales que no pocos artistas han sufrido, entre ellos Adele o Sam Smith, de hecho, y para que su sanación sea la mejor y pueda pronto regresar a los escenarios con El Dorado World Tour, se ha puesto en las manos del mismo especialista que les trató a estos de sus dolencias. Ojalá este año, Santa Claus le haya regalado a Shakira la mejor de las recuperaciones. Ella no querrá otra cosa.