Mientras Gerard Piqué (36 años) consulta el móvil, uno de sus hijos, recién salido de la piscina, trata de quitarse el agua que se le alojó en el oído. Su hermano, no muy lejos, trasteaba entre las tumbonas. Lo descrito forma parte de uno de los planes en los que el exblaugrana y sus dos pequeños han estado compartiendo desde el pasado jueves 27, fecha en la cual, él aterrizó en Miami. Es su primera visita a sus dos vástagos después de que estos se mudaran a Estados Unidos junto a su madre, Shakira (46 años), tras su separación del deportista.
El pasado jueves, con rostro serio y poco equipaje (tan solo llevaba consigo una maleta pequeña, de estas que uno puede llevar consigo en cabina), Gerard Piqué aterrizaba en el aeropuerto de Miami. Era la primera vez, de todas las que están por venir. El exfutbolista, tal y como figura en el convenio que acordó con Shakira, podrá disfrutar de sus hijos un total de 10 días al mes, además de las fiestas escolares, que siempre las pasará con el progenitor, y las vacaciones de verano, que repartirán al 70/30 a favor del catalán. En esta primera visita, Gerard se ha hospedado en un hotel de lujo muy cerca del centro escolar en el que los niños cursan estudios. Los pequeños se han quedado con él. Los tres han sido vistos en las inmediaciones del hotel, y han sido captados por las cámaras de otros huéspedes, que habrían hecho llegar las imágenes a medios como ‘Despierta América’, un magacín matutino de la televisión latina.
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Gerard Piqué, con sus dos hijos
Tirarse de cabeza y tomar el sol no ha sido lo único que han hecho los Piqué. Disfrutar de planes gastronómicos también han estado en su lista de actividades conjuntas. Una pizza al estilo napolitano, con esa masa esponjosa y característica, ha sido otro de los ‘must’ en el reencuentro de este padre con sus dos hijos. De nuevo, los clientes de este negocio han sido quiénes han delatado a Gerard. Los tres visitaron una pizzería que emula las famosas tratorias de Nápoles, con su decoración particularísima por las paredes, sus incontables referencias al Napoli y a su jugador más icónico, Maradona. Mucho más que un futbolista, un dios. Pizza y referencias futboleras, un planazo ideal para ellos tres.
¿Se va a mudar Gerard Piqué a Miami?
Mucho se ha hablado estos días sobre los planes de futuro del creador de la Kings League. ¿Planea comprarse una vivienda en Florida? ¿Seguirá hospedándose hoteles cada vez que tenga que visitar a la parentela? De momento todo son rumores y no hay una información clara. Es cierto que esta primera visita ha supuesto estar mucho más expuestos de lo que, probablemente, les habría gustado. No se ha respetado la privacidad ni del adulto ni de los niños, y han sido fotografiados sin permiso dentro de un hotel. Adquirir un piso o una casa, jugaría a favor de su privacidad, pero no está claro que esto vaya a suceder. Periodistas como Álex Rodríguez, afincado desde hace unos años en Miami, sostiene que Piqué anda buscando “un lugar donde residir”, algo que haría “después del verano, cuando los niños vuelvan de las vacaciones”. Gerard estaría interesado en adquirir algún inmueble ubicado en la zona financiera de Miami, algo mucho más céntrico y con mayor actividad nocturna, así como de ocio, que el lugar en donde Shakira tiene su mansión.
De llevar a cabo esta mudanza, Gerard Piqué pondría en riesgo su acuerdo con la madre de sus hijos. “Cuando se firmó el convenio se firmó con él viviendo en Barcelona y esta mudanza podría contradecir el acuerdo. Ella no quiere que esté en la ciudad de Miami, así que tendría que hacer uno nuevo en régimen de custodia compartida”.
En el aire queda si esta vivienda Piqué la adquiriría o solo la alquilaría. Tampoco queda claro su deseo expreso de mudarse, puesto que su pareja actual tiene su vida montada en Barcelona. Clara Chia trabaja en la ciudad condal como parte del equipo de Kosmos, la empresa de eventos deportivos de su chico, y, además, todas sus amistades y familia reside en Cataluña; por lo que iniciar una mudanza por su novio supondría decir adiós a muchas de las cosas con las que más disfruta.
Para Gerard Piqué también es un durísimo sacrificio tener a sus hijos a miles de kilómetros. Acostumbrado a ser parte esencial en la vida de los mismos, él era el encargado de llevarles al colegio, acompañarles a entrenamientos o partidos; pasar tanto tiempo lejos de ellos debe de ser durísimo.