Omar Sánchez e Irene Rosales, en ausencia de Anabel Pantoja, hacen de perfectos anfitriones de Belén Esteban

Después de coger el primer avión de la mañana, Belén Esteban ha llegado a Lanzarote. Si bien no parecía muy cómoda en el aeropuerto, su cara le ha cambiado al llegar a destino. Allí ha vivido un emotivo reencuentro con Omar Sánchez y Merche, madre de Anabel Pantoja, que han venido a recibir a los invitados que ya van llegando para la boda mañana en La Graciosa.

Anabel Pantoja ya ha salido de Cantora, de nuevo para coger en Sevilla un avión rumbo a Lanzarote junto a su prima Isa y Raquel Bollo. En su ausencia, Omar Sánchez se ha quedado al cargo de todo. La boda y los preparativos, que siguen en marcha a pesar de que ha corrido peligro su celebración, siguen en marcha y en las mejores manos, pues ha contado con la ayuda y el apoyo de Irene Rosales.

De Lanzarote, Omar, Irene, Merche y el resto de invitados que han empezado a aterrizar en la isla cogerán un ferry hasta La Graciosa, a la espera de la llegada de Anabel, que seguramente llegará a última hora de la noche. El hambre apretaba y han decidido comer todos juntos. Un almuerzo animado donde el tema principal ha sido el estado de ánimo de la novia y todo lo que ha ocurrido en el inesperado reencuentro de Isabel Pantoja con sus hijos, Kiko Rivera e Isa Pantoja.

Esta noche será imposible coger el sueño con tantas emociones vividas en las últimas horas tras la noticia de la muerte de doña Ana y con la boda por delante. A pesar de todo, tendrán que hacer todo lo posible por descansar para no perder ni un detalle de la boda de Anabel y Omar y poder vivirla intensamente. Belén Esteban confirmaba su asistencia a la boda y apoya a Anabel de que siga adelante, aunque, en su opinión, ella no la habría celebrado.