19 de marzo de 2018, 16:40
Los mayores apoyos en el trabajo de Mila Ximénez, tras su complicada situación ‘Sábado Deluxe’
Ella acabó abandonando el plató después de vivir una tensa noche con Carlos Lozano
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¿Será Carlos quien pueda con Mila?
Por él ya ha abandonado el plató dos veces en menos de dos meses. Él es capaz de sacar a la valiente Mila de sus casillas y no piensa tolerar ni media falta de respeto por su parte.
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Lo que más le dolió
A Mila, lo que más le dolió de todo el poli de Carlos fue cuando este dijo que ella no tenía dignidad. Eso la hizo revolverse en su asiento y sentir que no tenía por qué seguir aguantando los continuos ataques del Defensor de la audiencia
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Una atropellada salida del plató
Acaloradamente, y por no discutir más y acabar diciendo cosas de las que se arrepentiría, prefirió aparcar su colaboración en Sábado Deluxe y retirarse. Una de las primeras en preocuparse por ella y querer saber cómo estaba fue su amiguísima Belén Esteban, una de sus incondicionales
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Otros amigos
Como su estilista o Jorge Javier son también incondicionales de Mila que no pudieron pasar por alto la oportunidad de llamarla, hablar con ella y saber cómo estaba
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Jorge se posicionó del lado de Mila
A Jorge no solo le pareció mal la respuesta de Carlos, sino la pregunta en sí que, a todas luces, iba a herir a la colaboradora
Las amistades se convierten en apoyos fundamentales cuando uno atraviesa un mal momento. Y resulta imposible de definir de otra manera cómo se siente Mila Ximénez tras su fuerte enfado con Carlos Lozano, que se saldó con el abandono por parte de ella de ‘Sábado Deluxe’.
El Defensor de la Audiencia volvía a sentarse en el plató para someterse a un polígrafo. Una de las cuestiones a tratar, además de sus infidelidades, su ‘desaparición’ y demás, estaba la de su relación con sus compañeros de programa. El nombre de Mila salió a relucir con la pregunta, “¿consideras que Mila Ximénez no tiene dignidad?”. Y ahí se armó.
Lozano jugó la vieja carta de decir sin decir. Su respuesta fue “no”, pero el polígrafo determinó que mentía. En cristiano, que Carlos considera que él tiene más dignidad que Mila. Esto la enfureció. Era la gota que le quedaba por soportar en un vaso que llevaba tiempo amenazando con desbordarse. La colaboradora no aguantó ni una explicación más del novio de Miriam Saavedra, se arrancó el micrófono y su marchó a casa. En plató se quedaban, visiblemente tocados, dos de sus mejores amigos dentro del programa: Jorge Javier y Belén Esteban.
Fueron precisamente estos dos amigos, que nunca le fallan los que, una vez acabó el espacio, se interesaron por ella. Ximénez de Cisneros agradeció con todo su corazón cada conversación, cada mensaje de apoyo. “Gracias por estar y por preguntar cómo estoy. Te quiero”, dedicó a la de Paracuellos, a Jorge le envió otro sentido “te quiero”.
Belén entiende especialmente a Mila, pues ella también ha vivido desaforados desencuentros con Carlos Lozano, quien desde que asumió su nuevo papel en la corrala-show ha vivido tensiones con la mayor parte de la plantilla de colaboradores.
Es bueno saberse querido, especialmente en los momentos más duros. Y a Mila la adoran.
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