Que la recepción y banquete posteriores a la boda de Tatiana y Andrea iban a ser de todo menos convencionales lo teníamos clarísimo.
El pasado año, sin ir más lejos, en la boda de Margherita Missoni, la mejor amiga de Tatiana, el convite se celebró sobre la hierba. Los invitados se dejaron caer encima de cojines y alfombras por el suelo, y no queremos saber cómo diantres se levantaron aquellos que coquetearon demasiado con la bebida. El evento tuvo una temática zíngara; con adivinos, acróbatas y caravanas pintadas de vivos colores.
Tatiana y Andrea parece que montaron una fiesta menos étnica y más alocada, si tenemos en cuenta las fotos que los invitados han colgado en Instagram.
En principio, el palacio pidió que nadie filtrara imágenes a las redes sociales, pero claro, ¿quién le puede negar algo a la princesa Elisabeth von Thurn und Taxis, aristócrata alemana, reportera de ‘Vogue’, fanática de Instagram e hija de una princesa punk?
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