Esta semana la hemos visto representando la nueva línea de una firma de productos de belleza japonesa y no hemos podido evitar hacernos una vez más la misma pregunta: ¿Cómo hace Cate Blanchett para tener esa piel tan sumamente perfecta? Ni siquiera en ‘Blue Jasmine’, película de Woody Allen en la que interpreta a una mujer neurótica y desquiciada, con los ojos hinchados y rojos por las lágrimas y los efectos del alcohol, la vemos perder un pelín la luminosidad de su rostro. A sus 45 años, el color rosáceo aparentemente natural de su piel es uno de los más envidiados de las estrellas de Hollywood y del resto de las mortales. Y si no… que levante la mano quien no quiera parecerse a ella.

En Lecturas, hemos hablado con diferentes expertos, desde un maquillador hasta una nutricionista, pasando por un cirujano plástico, para que nos expliquen qué pasos tenemos que seguir para tener la piel de Cate Blanchett. Así que ya sabes: nunca es tarde para ponerse manos a la obra. Nosotros te explicamos cómo.

1. Utilizar un fondo de maquillaje similar al color de nuestra piel

Dice Antonio Serrano, el maquillador oficial de Shiseido España, que las españolas tenemos tendencia a utilizar un fondo de maquillaje oscuro para parecer más morenas, cuando, en realidad, si lo que queremos es quitarnos algunos años de encima, lo que tendríamos que hacer es utilizar un fondo parecido al color real de nuestra piel. Es lo que hace Cate Blanchett. “Lo que más me gusta de ella es que no tiene un estilo de maquillaje definido, sino que le gusta marcarlo en función del evento”, asegura Serrano. Así, cuando la actriz tiene un evento de prensa o publicitario, que es más “de tú a tú”, se maquilla más los ojos para resaltar su mirada. En cambio, si tiene que posar en un photocall o acudir a una entrega de premios, sabiendo que la foto dará la vuelta al mundo, resalta más sus labios. El maquillador oficial de Shiseido también nos recomienda no abusar de las sombras de ojos y utilizar siempre el mismo color para los pómulos.

2. Proteger la piel de los rayos del sol desde pequeños

Cate nació en el continente que tiene el índice de cáncer de piel más elevado del mundo. Por suerte, no ha recibido tanto el castigo del sol como sus compatriotas australianos porque emigró a Estados Unidos hace años. Aun así, tiene una piel muy blanca, algo que la población en general lo ve como un símbolo de belleza y juventud, pero que es un peligro en potencia. Es lo que nos explica el doctor Iván Mañero, fundador de la clínica de cirugía plástica y regenerativa IM CLINIC, para quien la actriz “tiene que cuidarse muchísimo del sol”. Nosotros, también. Según la propietaria del centro de estética y belleza KB Centers de Barcelona, Karima Bennaim, debemos protegernos del sol desde pequeños y tanto en verano (con una protección mínima de 50), como en invierno (a partir de 20). La clave es “elegir el protector solar con los principios activos adecuados para cada tipo de persona”. Y eso es algo que se tiene que hacer con ayuda de especialistas. “En los centros de estética hacemos seguimiento de nuestros clientes, sabemos cómo les cambia la piel según la época del año, si es una mujer embarazada, si le salen manchas…”.

3. Hidratarse a diario y exfoliar la piel una vez por semana

Limpieza diaria. Esa es la premisa básica para tener una piel hidratada, algo necesario a no ser que queramos avanzar los síntomas del envejecimiento. La esteticista Karima Bennaim recomienda que nos hagamos “una exfolación una vez a la semana en casa para eliminar toxinas, regenererar… Y como mínimo una vez cada tres meses una limpieza profunda con profesionales”. Para el doctor Iván Mañero, "la piel es un órgano perfecto, un órgano que nos ha aislado de las bacterias, del agua del mar, de todo lo que nos ha rozado a lo largo de millones de años... Pero es muy difícil que una crema se filtre a través de esa piel”. Por eso las empresas dedicadas a la belleza se está esforzando por innovar con productos que el cirujano plástico denomina “cosmética maquillaje”. Es decir, cremas que te hidratan pero a la vez te maquillan porque “incluyen micropolvos que hacen que te quede un cutis muy bonito”.

4. Probar soluciones estéticas sin bisturí

Cate Blanchett se ha declarado muchas veces contraria al bisturí. Del bótox no quiere ni hablar. Pero según el fundador de IM CLINIC, seguro que la actriz sí es partidaria de la mesoterapia facial. Son infiltraciones a base de vitaminas, aminoácidos y ácido hialurónico que lo que pretenden es reducir las arrugas de expresión, como por ejemplo las patas de gallo. En cuanto al ácido hialurónico, Mañero dice que “es como si inyectáramos una esponja que absorbiera el agua”. El especialista augura que el tratamiento más revolucionario de los próximos años será el de la inyección de factores de crecimiento. Son proteínas que se localizan en las plaquetas y que aceleran la regeneración del tejido. Extraen sangre del paciente, la tratan para obtener estas proteínas y las inyectan de nuevo bajo la piel. “Es un choque directo”. El efecto de estos tratamientos dura uno o dos meses, suficiente si lo que quieres es pasearte por la alfombra roja en la ceremonia de los Oscars. Por eso cree que Cate Blanchett los practica, puesto que son naturales.

5. Comer sano, pero sin dietas milagro, y practicar deporte

Nada de lácteos, trigo, azúcar, carne roja, patatas, tomates, frutas, alcohol ni café. Esa es la base de la alimentación de Cate Blanchett y de muchas otras famosas de Hollywood, que están poniendo de moda la denominada ‘dieta alcalina’. Lo que intentan es es modificar el pH del organismo para que se vuelva más alcalino con el objetivo de bajar de peso. Para Silvia Tremoleda, “no hay estudios científicos que demuestren que la dieta alcalina, como otras que se han puesto de moda, funcione”. La nutricionista, diplomada en Dietética y Nutrición Humana por la Universidad de Barcelona y máster en Sports Nutrition por el Comité Olímpico Internacional, asegura que prescindir de alimentos como el trigo o la fruta no tiene ningún efecto directo sobre la piel. Lo que funciona es seguir unas pautas de alimentación equilibrada, nada de milagros dietéticos extraños. Tremoleda recomienda una dieta rica en vitaminas y antioxidantes, pero extraídos directamente de los alimentos, no en pastillas. Así pues, tenemos que comer frutas, verduras, legumbres, yogures, pescado… y eliminar el azúcar, el alcohol y el tabaco. “La gente que bebe o fuma está más deshidratada y eso se nota mucho en la piel”, explica. También es importante hidratarse con agua, evitar las bajadas y subidas de peso, dormir siete u ocho horas diarias y practicar deporte con regularidad.