Kim Kardashian odia estar embarazada

La 'celeb' ha engordado 23,5 kilos y, aunque nunca oculta su barriga, se encuentra demasiado pesada

Kim Kardashian, embarazada de ocho meses

Ya le queda apenas un mes de embarazo, por lo que muy pronto Kim Kardashian y su marido, el rapero Kanye West, podrán verle la carita a su segundo hijo, su primer varón. Si todo trancurre con normalidad y siempre y cuando el bebé no se adelante, el parto estaría programado para el próximo 25 de diciembre, día de Navidad, según publicó el portal TMZ hace unos días. Según el citado portal, el matrimonio ya tiene reservadas las habitaciones en el prestigioso hospital Cedars Sinaí de Nueva York, el mismo en el que Kim dio a luz a su primera hija, North, quien cumplió dos años el pasado mes de junio.

Kim Kardashian, embarazada de ocho meses

Kim Kardashian, embarazada de ocho meses de su segundo hijo

Quien sin duda tiene más ganas de que nazca el bebé es Kim, ya que ha manifestado que odia estar embarazada: se ve enorme y se siente muy pesada, lo cual no es extraño, ya que en ocho meses ha engordado 23,5 kilos, algo que a los médicos no les debe hacer mucha gracia. “No creo que la preñez y yo nos llevemos bien. Es muy duro quedarme embarazada y me siento bendecida de que me haya quedado y sé que merece la pena. No me quejo, simplemente soy honesta y lo odio. Estar embarazada no es para mí. He escuchado historias sobre lo alucinante de estar embarazada, o eso me han dicho mi madre y Kourtney, pero no me voy a sentar aquí a decir eso. Es horrible”, ha declarado.

Además, a Kim le cuesta mucho volver a recuperar la figura tras haber sido madre. Le sucedió tras dar a luz a North y, posiblemente, le vuelva a pasar ahora con su segundo hijo.

Pero que ella se vea enorme no significa que no esté orgullosa de su estado, que lo está. Baste ver cómo nunca oculta su barriga: vestidos totalmente ajustados y/o transparentes, así como pronunciados escotes, dan buena muestra de que, enorme o no, ella está feliz ante la inminente llegada de su bebé.

Loading...