Ayer por la noche llegaba al mundo, entre muchísima expectación, la pequeña Ana Rivera Rosales. Desde primera hora de la tarde todos esperábamos el nacimiento de la nueva integrante del clan Pantoja, la segunda hija de Kiko Rivera, la primera del dj con Irene Rosales.

Su abuela no la pudo conocer ayer por la noche porque tuvo que volver a la cárcel tal y como mandan las condicones de su primer grado, pero a primera hora de la mañana Isabel Pantoja ya estaba en la clínica Sagrado Corazón de Sevilla para coger entre sus brazos a su tercera nieta gracias a un permiso carcelario obtenido para poder conocer a la pequeña. Y dicen que desde entonces no se ha separado de ella.

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isabel pantoja conoce a su nieta ana

Durante toda la mañana se ha esperado la visita de su tía, Isa Pantoja. Las horas han ido pasando y la hermana de Kiko no ha visitado el hospital, quizá porque, como madre que ya es, ya sabe que las primeras horas son difíciles y que es conveniente dejar descansar a la nueva mamá. También porque su pareja, Alejandro Albalá, tenía clase hasta pasado el mediodía. La pareja, sin embargo, ya ha ido al hospital. Y no han ido solos: el pequeño Albertito ha ido con ellos para conocer a su nueva primita.

Los dos bajaban del coche, Isa abriendo la comitiva y el pequeño en brazos de Alejandro vestido muy elegante para la ocasión: un cárdigan azul cielo, bien peinadito y visiblemente nervioso, seguramente por la cantidad de cámaras y reporteros que se apostan a la salida del hospital

Isa, Alejandro y Fran visitan a la nueva integrante del clan Pantoja

Isa, Alejandro y Fran visitan a la nueva integrante del clan Pantoja

El otro que no ha querido dejar de conocer a su nueva familiar ha sido Fran Rivera, que ha llegado motorizado y solo. Los hermanos están más unidos que nunca, tal y como demostró el buen rollo que reinó entre ellos durante la boda de Cayetano que, por cierto, aún no se ha acercado al hospital a conocer a su nueva sobrina.