Iker Casillas se convertía en padre por segunda vez el jueves pasado, y cuatro días después él y Sara Carbonero presentaban al mundo a Lucas, su hijo más pequeño. Y tan solo un día después de que esto haya ocurrido, tenemos las primeras declaraciones de un padre que se deshace con sus criaturas y que no puede esperar a ver cómo los dos hermanos se lo pasan en grande el día de mañana.
El portero ha hablado para la cadena Cope, más concretamente para el programa El Partido de las 12, en donde le han felicitado por su paternidad. El madrileño ha dado las gracias y hablado de cómo reaccionará Martín con este ‘recién llegado. “Todavía es muy pequeño, pero poco a poco se irá haciendo a la idea y lo disfrutará”. ¡De aquí a nada serán inseparables!
Además, y antes de marcharse para jugar los partidos de la Eurocopa (España debuta el lunes 13 contra República Checa), ha hecho un rápido balance de lo que ha supuesto este primer año fuera del club en donde se forjó su estrella. "Ha sido difícil porque el club necesitaba como el comer lograr un título este año para quitarse esos dos años en blanco. A nivel colectivo no ha sido bueno porque no hemos conseguido lo que buscábamos (…) Pudimos conseguir la Copa de Portugal pero al final en los penaltis no lo hicimos. A nivel personal me ha costado un poco ubicarme y saber dónde estoy. Una vez que estás un año, que estás un tiempo ahí, ya sabes cómo es la Liga, cómo son los desplazamientos que también es importante. Para mí no era fácil salir de Madrid", ha desvelado para los oyentes de la radio.
Iker está contento con la vida que tanto él como su familia están llevando, y valora que se respete su privacidad, algo que les da una enorme libertad. También se queda con el cariño y calor recibidos hasta ahora.
Y de marcharse de la ciudad portuguesa, nada. Casillas seguirá fiel al contrato que firmó en su día y que lo vincula al club durante los próximos dos años. En 2018 puede que las cosas cambien.