Esther Arroyo se ha convertido en la gran sorpresa del programa de televisión “Tu cara me suena”, que además es su gran regreso a la pequeña pantalla tras una sonada ausencia. La modelo, actriz y presentadora ha conseguido alzar el vuelo como el Ave Fénix y ha resurgido de sus cenizas con una desconocida y potente voz que sorprende en cada gala a público y jurado.

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No le da miedo, es una luchadora y va a por todas, según dicen aquellos que la ven esforzarse día a día dando lo mejor de si misma en el plató del exitoso concurso. Las secuelas que padece en su pierna izquierda tras el terrible accidente de coche que sufrió hace unos años le hacen sentir dolor pero ella hace frente a esas trabas y no se le escucha ni una sola queja.

En este renacer de la ex Miss España, que hace poco más de un año afirmaba que creía que nunca volvería a trabajar, tienen mucho que ver su marido, el empresario Antonio Navajas, y la hija de ambos, Ainhoa, de 10 años. Ellos, que siempre están a su lado, han sido el motor principal para que Esther aceptara el reto de regresar ante las cámaras en un formato tan difícil y a la vez tan exigente.

Camaleónica en sus personajes, la guapa ex modelo y ex actriz, sonríe ahora feliz a la vida y aprovecha su tiempo libre para disfrutar de su familia. Los tres juntos, como suelen hacer cuando los compromisos profesionales se lo permiten, fueron a dar una vuelta por las calles de Fuengirola, Málaga, localidad donde ahora residen tras trasladarse hace unos meses desde Marbella.

La debilidad de Esther son sus hijos, tanto la pequeña Ainhoa como Francisco José, su primogénito, fruto de su anterior relación con el dentista Francisco Mayor, y que ahora tiene 23 años. Sobre él asegura que está muy orgullosa, vive fuera de España y le encanta la música, y que la pena es que le ve poco.

A Esther, que en marzo cumplió 48 años, seguro que le encantaría que Francisco José se sumara al próximo paseo familiar por el municipio malagueño, donde pudimos ver como la pequeña Ainhoa ya no es tan pequeña y sigue los pasos de su madre en cuanto a estatura y belleza.