Por JULIA GUINOVART

 

Pocos pueden presumir de haber inspirado un musical, de tener vidas dignas de convertirse en una ópera, por ejemplo. Obras, decimos, que se estrenen por todo lo alto, en Estados Unidos incluso. Son sólo unos pocos quienes logran convertir su vida en una historia digna de ser musicada. Y Ceciclia Gómez está entre ellos. ¿Quién?, se preguntarán algunos: pues Cecila Gómez, la restauradora de arte que tornó el Ecce Homo de Borja (Zaragoza), sin querer, en un cuadro futurista que dio la vuelta al mundo. Exacto: ¡de Borja al Broadway!

 

"Con la intención de salvar un fresco tristemente deteriorado y olvidado de Jesús, una anciana de España intenta restaurarlo, aunque solo lo empeora. La indignación es intensa y llegan incluso amenazas; hasta el espíritu del artista original aparece en escena". ¿Escena? Sí, la cita que aquí aparece no es más que el argumento de una obra de teatro, de una ópera que ya tiene música y lugar y fecha de estreno: Estados Unidos en 2016. Cecilia y su Ecco Homo no sólo llamaron la atención en España.

 

"Cuando la foto de una restauración de arte se convierte en viral, llegan los turistas de todo el mundo, ayudando así a revitalizar la economía de un pueblo que estaba en crisis. ¿Fue un milagro? ¿Arte independiente? Un acto de fe desinteresado? ¿O tan solo otro meme de internet?".

 

Con estas premisas se presenta 'Behold the man' ('He aquí el hombre'), una ópera escrita por Paul Fowler (compositor) y Andrew Flack (libretista), personajes de éxito en Estados Unidos. Y ya existen piezas sobre la historia, aquí pueden escuchar la apertura, por ejemplo.

 

 

Aquella imagen desdibujada que se convirtió en 2012 en un fenómeno que ha logrado que el pueble se sitúe en el mapa turístico. Ya son 2.000 las personas que visitan Borja cada mes, según datos del propio Ayuntamiento. De actualidad estos días porque aparece en The New York Times. Y mientras, Cecilia, aquella mujer que lloraba por todas las televisiones pidiendo clemencia para su arte, se ha convertido en una pintora de éxito que expone y vende obra cual Miró moderna. Con una ópera a sus espaldas, el arte naïf de nuestra "anciana de España" seguramente cotice al alza. He aquí el triunfo.