Bertín Osborne y Fabiola Martínez anuncian su ruptura tras 20 años de relación y dos hijos en común

"Fabiola y yo nos hemos separado hace poco tiempo. No hay un motivo concreto sino problemas de convivencia. No hay ni ha habido terceras personas que nos hayan motivado a tomar esta decisión y si la dificultad de convivir con nuestras distintas personalidades". 

"Confieso que soy complicado en el día a día y asumo toda la responsabilidad de los motivos que han dado lugar a esta decisión", admite el artista que solo tiene palabras de cariño para su todavía mujer: "De Fabiola solo puedo decir que es una persona maravillosa, gran compañera, estupenda mujer y como madre literalmente única. Espero que aunque vivamos separados, sigamos unidos en la amistad de nuestras familias".

El comunicado termina con el deseo de no volver a dar ninguna declaración al respecto por el dolor que a él le supone: "Para mí es muy doloroso por cuanto mi manera de ser ha sido determinante para tomar esta decisión".

"Mis hijos tendrán el cariño de sus padres como siempre y entre nosotros siempre habrá cariño y respeto".

La última vez que se les vio juntos fue el pasado mes de octubre cuando Fabiola Martínez no dudó en acompañar al artista a la entrega de los Premios Radiolé. Desde ese momento, el artista ha vivido a caballo entre Jerez de la Frontera, donde tiene una finca, y Madrid, donde reside Fabiola junto a sus hijos.

Lo suyo fue amor a primera vista y la diferencia de edad -16 años- nunca fue un impedimento para ellos. Después de conocerse en 2001 durante un casting de trabajo no sería hasta junio de 2006 cuando decidían darse el 'Si quiero' en una ceremonia íntima celebrada en . Poco tiempo después, la modelo venezolana se quedaba embarazada de su primer hijo, que nacía de manera prematura con diversos problemas.

Lejos de distanciarlos, la dura enfermedad de su hijo Kike les unió más que nunca y provocó que Bertín no solo sintiera amor hacia la madre de sus hijos pequeños sino un orgullo incondicional por la madre en la que se había convertido. Ahora, cuando se cumplen dos décadas desde el día que sus miradas se cruzaran por primera vez, han decidido tomar caminos por separado pero manteniendo el cariño y respeto intacto.