Belén Esteban ha dado carpetazo a uno de los episodios más amargos de su vida pero ha decidido olvidarlo todo y buena cuenta de ello ha dado en su reaparición en el concierto de Isabel Pantoja, esta noche en el Wizink Center de Madrid. Junto a muchos amigos y compañeros de Telecinco y, sobre todo, acompañada de su marido, Miguel Marcos, quien es su máximo apoyo.
La colaboradora, 24 horas más tarde del desahucio de Toño Sanchís de su casa tras una larga lucha que ha durado años, ha reaparecido con una sonrisa de oreja a oreja. Su última aparición fue ayer, unas horas más tarde de que su ex representante abandonara la residencia en presencia de la Guardia Civil, en el programa en el que trabaja, Sálvame.
"Ha sido mucho tiempo, no ha sido fácil la situación, pero todo llega. Estoy un poco nerviosa y emocionada", han sido las primeras impresiones que salían de sus labios en 'Sálvame'. "Yo sinceramente sabía que hoy era el día. Se tenía que ir y me siento muy satisfecha", decía aliviada. Belén reconocía también "tengo una contractura...". Y es que de los nervios que ha pasado alguna vez ha llegado a estar "a 400 de azúcar, una barbaridad". Un disgusto del que se ha repuesto descansando este viernes en casa junto a sus seres queridos.
Ya más tranquila y con una felicidad desbordante, la colaboradora con un look casual y junto a su inseparable marido lo ha dado todo con la música de Isabel Pantoja en el que ha sido su gran regreso a los escenarios tras dos años de ausencia en la música. Belén se ha dado un auténtico baño de multitudes y ha mostrado su agradecimiento a las fans que comparte con Pantoja con las que se ha encontrado en las gradas del estadio. Luego ha bailado, ha cantado y lo ha grabado todo con el móvil.