Por CONCHI ÁLVAREZ DE CIENFUEGOS
Hubo un tiempo en el que a Leonardo DiCaprio no le llovían los papeles. Unos años en los que sólo era un chico de Los Ángeles tratando de abrirse un hueco en una ciudad plagada de niños prodigio. Entonces, sin acreditaciones ni nominaciones, se recorría con su book de fotografías los castings de toda la ciudad. Uno de ellos fue el de ‘Rebeldes’ (‘The Outsiders’), película que nos dio a conocer a actores como Tom Cruise, Rob Lowe o Matt Dillon. En concreto, Leo hizo la prueba para el papel de Ponyboy, que finalmente consiguió C.Thomas Howell. Tenía sólo 9 años y ya sabía a lo que quería dedicar su vida.
Como él, cientos de niños acudían a las audiciones para labrarse un porvenir brillante en Hollywood. Y a pesar de que muchos lo intentaron siendo unos tiernos infantes, su oportunidad no llegó hasta años después. Tal es el caso de Scarlett Johansson. La actriz hizo la prueba para ser la hermana mayor de ‘Jumanji’, un papel que acabó siendo de Kirsten Dunst, que ya venía de triunfar junto con Brad Pitt en ‘Entrevista con el vampiro’. Finalmente la oportunidad de Scarlett llegó con ‘El hombre que susurraba a los caballos’ y ahí dio comienzo su meteórica carrera.
Otros, como Natalie Portman o Henry Thomas, se hicieron con el papel en el primer segundo de la prueba. La primera fue la perfecta Mathilda en ‘Leon el profesional’ cuando tenía 13 años, dejando a todos impresionados con su picardía. Pero el que verdaderamente dejó de una pieza a todo el equipo de casting ese fue Henry Thomas, el niño de ‘E.T.’, tan impresionado quedó Spielberg de su interpretación, de cómo vivía y sentía que el extraterrestre era su amigo, que no pudo más que gritar “muy bien chico, el trabajo es tuyo” cuando el niño terminó su prueba.
También existen los casos de los niños Disney. La compañía resulta ser una auténtica mina para los rostros más jóvenes y frescos. Gracias a sus series conocimos a mujeres tan polifacéticas como Selena Gómez o Miley Cyrus, que no sólo saben actuar, sino que también cantan de maravilla. Nada se les resiste a las que un día fueron niñas Disney Channel. Ni tan si quiera hacer ‘twerk’.
Bonnus. Uno de los grandes, como es Robert De Niro, también tuvo que hacer pruebas para convertirse en la versión joven de Vito Corleone en la segunda parte de ‘El Padrino’, su primer papel importante. Había nacido una estrella.