El 19 de noviembre se ha fijado que Ginevra Ena Lequio Palacios reciba el primer sacramento de su corta vida. Será bautizada en Roma, como manda la tradición familiar paterna, que tanto le gusta seguir a Alessandro, orgulloso de sus orígenes. Ese día, además de los padres de la pequeña, estarán ante la pila bautismal los padrinos, Ana Rosa y Álex Lequio Obregón, el hijo mediano del conde.

Según informa Paloma Barrientos en Vanitatis, el evento tendrá lugar en el palacio Torlonia, el que fuera residencia de la abuela de Alessandro, la princesa Beatriz. Una ubicación única y solo apta para personas emparentadas con la realeza, y de eso Ginevra, va sobrada, pues, igual que sus hermanos, ella también es una candidata al trono. Eso sí, tendría que pasar innumerables desgracias para que se diera el caso de que la hija de Lequio se convirtiera en reina de España, pero cosas menos probables se han visto.

Cuando reciba las aguas bautismales, la niña vestirá un faldón con mucha historia, pues antes de ella fue vestido por el Rey Juan Carlos, así como todos sus hijos, el Rey Felipe, y las dos infantas, Elena y Cristina. Se trata de una creación realizada en color beige, con puntillas, encaje, cintas de raso y pequeñas flores. Todo, por supuesto, bordado a mano.

La celebración será de lo más sencilla: una vez la niña se haya convertido en miembro de la comunidad cristiana, se celebrará un almuerzo para los invitados. Una lista que, por cierto, no será nada de extensa. A los hermanos mayores de Ginevra, Clemente y Álex, hay que añadir los abuelos maternos, su tía Sandra, hermana del padre y unos pocos amigos cercanos. Añadamos también la presencia de la madrina de excepción, Ana Rosa Quintana, que, como ya hemos dicho, tendrá un papel fundamental pues será la madrina de la pequeña.