20 meses han pasado desde el fallecimiento de Aless Lequio. El 13 de mayo de 2020, la vida de Ana Obregón se rompió en mil pedazos tras perder a su hijo. Casi dos años después de esta trágica noticia, la presentadora no puede controlar el dolor que le produce la ausencia de Aless. Ana ha demostrado, durante todos estos meses de duelo, que no hay nada ni nadie que llene el vació que siente y ha lamentado todas las cosas que su hijo se ha perdido por culpa del maldito cáncer. Ana Obregón ha encontrado refugio en su familia y la muerte de su madre un año después de Aless también la han hecho tocar fondo. A pesar de todo, la bióloga ha sacado fuerzas de flaqueza para afrontar su día a día pero el dolor que siente es inmenso y lo ha vuelto a demostrar con el desgarrador mensaje que le ha dedicado al joven.

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"Sería una egoísta escribir que llevo 20 meses muriéndome sin ti. Porque no se trata de mí, aquí yo no soy ni la protagonista ni la víctima. Lo justo sería decir que el protagonista y la víctima eres tú. Porque tenías 25 años cuando te diagnosticaron el maldito cáncer. Porque llevas 20 meses sin despertarte cada mañana con esa ilusión inmensa que tenías por vivir, de seguir trabajando incansablemente en la empresa que creaste, de salir con tus amigos a bailar, a divertirte, de crear algún día tu familia y tener los cinco hijos que querías, de ganar dinero para que tu madre ya no trabajara más", ha escrito Ana Obregón dejando al descubierto los planes que Aless Lequio tenía en mente para su futuro. Además, ha compartido una serie de imágenes de lo más tiernas que reflejan a la perfección cuáles fueron los momentos clave en la vida del joven.

Ana Obregón siente rabia porque la vida le haya arrebatado a una de las personas más importantes y ha querido agradecer de corazón a todos sus seguidores el apoyo que le han brindado todo este tiempo: "Así que hoy solo me salen dos palabras impotencia e injusticia. Porque la vida no quiso cumplir con lo que era justo y por eso estoy enormemente cabreada con la vida. Porque nos arrancó dos corazones de cuajo: el tuyo, el mío... Gracias a todos por permitirme compartir mi dolor", ha zanjado a través de su perfil de Instagram.

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El trabajo se ha convertido en la mejor medicina para Ana Obregón. A pesar de que su contagio provocó que se ausentara de las Campanadas de Nochevieja, la actriz acaba de emprender un nuevo proyecto profesional como investigadora estrella de la tercera temporada de Mask Singer. Además, tiene muchos motivos por los que sonreír ya que su padre acaba de superar el coronavirus a los 95 años: "Bravo papá", ha escrito vía 'stories' profundamente orgullosa de la valentía que ha mostrado Antonio García.