El duelo estaba asegurado. Como ocurre en cada edición de 'MasterChef', los finalistas iban a ir descartándose a lo largo de la última entrega del programa. El nivel, tal y como destacaba el jurado, era impresionante. La audiencia, eso sí, tenía ya sus favoritos en redes sociales. No todos los que habían logrado llegar a la última entrega del programa contaban con el favor del público.
Una primera prueba iba a nombrar a la primera duelista que se iba a enfrenar en la prueba final de cocinado libre. Los otros tres iban a tener que continuar trabajando para ganarse la oportunidad de luchar por la final. Fue Bea la que, de forma sorprendente, lograba vencer el primer enfrentamiento. No obstante, nada estaba asegurado.
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La “mosquita muerta”, como acabaron bautizándola sus compañeros, llegaba a la final después de haber pasado por más pruebas de eliminación que nadie. Todo un récord que hacía que el público en redes sociales enloqueciese. ¿Quién iba a ser su rival en el cocinado libre? Pues las apuestas no se equivocaron.
La flamante ganadora de 'MasterChef'
Era Gabriela quien se hacía con la segunda plaza de duelista. Embarazada de seis meses, se sometía a un estrés y una precisión casi legendarias. Ambas preparaban el menú que ya llevaban pensado y sorprendían a los jueces. Estos confesaban que tenían muchas dudas y que era una de las finales más reñidas de las muchas que han vivido.
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Finalmente, se decantaban. Gabriela se convertía en la ganadora de 'MasterChef'. Un menú impecable donde destacaba la técnica era el argumento que esgrimía el jurado para decantarse por una de las dos. "Ganar MasterChef significa lo más grande que he hecho en mi vida”, confesaba ya Gabriela con su premio de 100.000 euros en el bolsillo.