Veo el miércoles a Carmen Alcayde en la rueda de prensa de Gran Hermano 17 con un micrófono de Cazamariposas y se me vienen a la cabeza un montón de recuerdos. Todos buenos. Compartí con ella cinco intensos años de mi vida, cuando todavía éramos jóvenes, hacíamos locuras y teníamos fuerzas suficientes para llevarlas a cabo. Pese a que tiene ya tres hijos no la veo como una madre de esas que han sentado tanto la cabeza que se convierten en unos muermos andantes. Al menos a simple vista sigue conservando esa insensatez que a veces te sacaba de quicio y otras conseguía que no pararas de reír. Profesionalmente la vengo observando desde hace algún tiempo y me gusta el camino que está tomando su carrera profesional. Carmen es rápida, divertida, disparatada, intelectualmente anárquica y está guapísima. Quizás muchos no comprendieran que fichara por un programa menor como “Cazamariposas” pero yo aplaudo su decisión. Si quieres trabajar en televisión tienes que salir en pantalla. Aunque sea dando el horóscopo. Porque cuando se inicia un nuevo programa y se piensa en caras para presentarlo siempre te vienen a la cabeza personas en activo, no aquellas que vegetan en su casa esperando oportunidades que estén a su altura.