Esta muchacha me tiene cada día más ganado el corazón. Qué gusto trabajar con ella. Qué pocos impedimentos pone a que le preguntemos por su familia porque sabe que por eso está sentada en un plató. Y, como sabe que está ahí por eso y que a lo mejor llega un día que está hasta las narices, está trabajándose un plan B. Por si las moscas. Estudia y se prepara y se le nota. El viernes, después de su intervención en el ‘Deluxe’ y durante una publicidad, hablamos con ella un rato el director, Rafa Mora y yo. Rafa le dice que ha madurado mucho. Y ella contesta sin pestañear: “Que no, que no, que yo sigo teniendo la cabeza p’allá”. ¡Ay, Isa! Darte cuenta de que tu cabeza a veces te traiciona es la mayor muestra de cordura. Hazme caso, que de esto sé un poco. Isa P. jamás ha vetado a un profesional. Jamás le ha perdonado la vida a alguien que le ha hecho una pregunta complicada. Que yo recuerde, cuando se ha sentado en un plató, no ha vetado nunca ningún tema. Parece mentira, pero en nuestra televisión, la del entretenimiento, todavía queda gente así. A ver si cunde el ejemplo.