Raquel Jiménez y Dabid Bisbal están dispuestos a demostrar que las segundas partes también pueden ser buenas.

Tras un impás en su relación, durante el cual David vivió un fugaz romance con una miss puertorriqueña, cantante y modelo vuelven a estar juntos "más despacito, pero con las cosas más claras. Ya no vamos a ciegas". Son palabras de Raquel. La sevillana se convirtió por unos minutos en embajadora de El Corte Inglés. Los grandes almacenes donaban a UNICEF un cheque por valor de 62.000 euros y ella hacía entrega de esa cantidad. "Feliz, muy contenta" y espléndida enfundada en un Hugo Boss que le quedaba como un guante, confesó que "ganas" de ser padres no les faltan. "Si viene, David encantado, pero por ahora no se puede", respondía con un brillo especial en los ojos.

 

Raquel, estás radiante...
- Es que estoy muy contenta. Súper contenta porque tenía muchas ganas de un acto así, solidario. Todo lo que tiene que ver con los niños me encanta. Al ser madre supongo que todos estos temas te tocan el corazón, por ese instinto... La infancia, los niños... Además, yo ya tengo a un niño apadrinado en Perú. Siempre he querido colaborar con estas causas.

No sabíamos que tuvieras un niño apadrinado. ¿Gael le conoce?
- Aún no. Gael sabe de él porque nos mandamos fotos, cartas, algún detalle en fechas señaladas. Yo le explicó por qué él vive así y Gael me pregunta que cuándo podrá verle. Tiene ya bastante conciencia de lo importante de la vida.

Como el amor... ¿Tú estas feliz?
- Sí. Feliz. Muy contenta.

Dandoos una segunda oportunidad imagino, viviendo una etapa nueva. ¿Es muy distinta vuestra relación ahora a la de antes?
- Cada etapa en una relación es distinta. Pero si tienes ilusión y estás muy enamorada, da igual que hayan pasado tres meses o un año. Yo lo estoy. Vivo cada etapa enamorada y a tope. Y ya está.

¿Por qué os separasteis si estabais enamorados?
- Por situaciones. Situaciones que se dan y decidimos que separarse era lo mejor.

¿Y ahora?
- (Risas) Si decides volver es que algo ha pasado para que te haga un click y queráis estar juntos de nuevo.

Dicen que tras una reconciliación viene una boda...
- (Risas) De momento, no. Cuando suceden estas cosas lo mejor es ir despacito, pero con las cosas claras. Ya no vas tanto a ciegas. Además, como modelo, me he vestido muchas veces de novia. Ya me habéis visto así.

Y seguís separados, quiero decir, sin vivir juntos...
- Sí. Siempre viajando. De momento, él vive en Madrid y yo en Barcelona.

¿La distancia no es muy pesada?
- Siempre es un problema, pero se lleva. Cada relación tiene sus pros y sus contras, y la distancia es un problema gordo en la nuestra, pero de momento, no se puede. Es así porque yo no me puedo ir a Madrid y David lo tiene todo ahí.

¿Te ata lo profesional a Barcelona?
- Hago muchos cástings en Barcelona. Mi agencia, mi oficina está en Barcelona, pero sobre todo, mi niño. En Barcelona está su cole, su entorno. Esa es la razón.

¿Eres muy madre coraje?
- Sí. Lo soy. Pero también soy muy exigente. Lo mimo y lo consiento lo justo y muchas veces pienso "tiene solo cinco años, no es niño grande"...

¿Y volverías a ser mamá? ¿David quiere?
- Ganas no faltan pero es muy difícil. Ya con Gael es muy complicado, porque mi familia no vive conmigo, vive en Sevilla y ahora mismo un bebe sería una odisea. Pero, si viene, viene. David, encantado, pero por ahora no se puede.