El caso de Daniel Sancho (29 años) va camino de convertirse en uno de los mayores comentados de toda la historia. Cada día surgen nuevos datos que arrojarían algo de la luz sobre los posibles motivos que habrían llevado al cocinero español a cometer el presunto asesinato de Edwin Arrieta (44 años) en su viaje a Tailandia. Pero antes de este destino hubo otros que ambos compartieron.
Una de las mejores amigas del cirujano colombiano ha acudido al programa de ‘Y ahora Sonsoles’ para contar su versión de lo sucedido, ya que habló con el presunto asesino y con la víctima de este durante su estancia en el país del sudeste asiático. Además, ha relatado toda su conversación y ha contado detalles del último encuentro que tuvieron los dos en Madrid antes de emprender su viaje al que sería el último destino del médico.
La relación de Daniel Sancho y Edwin Arrieta
Viviana ha contado a Sonsoles Ónega (45 años) todo tipo de detalles de lo que ella conocía de la relación que mantenían Edwin y Daniel. Ha comenzado explicando que se conocieron en el mes de octubre del año pasado y que fue a través de la red social de Instagram, ya que el médico colombiano le reaccionó a una de sus historias en la que compartía contenido de su canal de cocina. Ahí comenzaron a hablar.
En el mes de diciembre el cirujano ya viajó a España para reunirse con él, puesto que tenía mucho interés en formar parte de los negocios del hijo de Rodolfo Sancho (48 años). “Edwin quería venir a vivir a Madrid y homologar su título de cirujano. Quería montar un negocio con Daniel o estaba en proceso de hacerlo”, detalla la amiga en el mencionado espacio de Antena 3 donde ha sido entrevistada.
Por otro lado, ha visto la luz una fotografía en la que el cirujano posaba junto a otros amigos y escribía en el texto: “Los nuevos socios. Faltó Sancho”. De esta manera dejaban claro que mantenían un vínculo cercano, ya que en el mes de abril también realizaron una escapada a Ibiza, donde ya se habían filtrado fotografías de los dos en un viaje al que acudieron, parece ser, los dos solos.
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Atresmedia
El último viaje de Daniel Sancho y Edwin Arrieta
Sin embargo, en el mes de junio los dos volvieron a coincidir. Esta vez se trataba de la inauguración del local de hamburguesas en el que trabajaba el hijo de Silvia Bronchalo (48 años). Esto demuestra que la relación de ambos era más fuerte de lo que se pensaba, ya que no todos los amigos de Daniel fueron a dicho evento como muestra de apoyo en su proyecto laboral.
Pero la última vez que ambos coincidieron fue en el mes de julio, coincidiendo el lugar y tratándose del restaurante donde trabajaba el cocinero. De hecho, en el mencionado programa de Antena 3 han emitido un vídeo donde aparecen ambos en el mismo local, con Daniel organizando la cocina con sus empleados y Edwin muy próximo a ello, como una señal más del apoyo que hacía por el trabajo del chef.
La gran mentira de Edwin Arrieta
De todo el relato de la amiga del médico colombiano ha resultado muy extraño el hecho de haber descubierto una mentira que contó a todas sus amigas, aunque se desconoce el motivo de ello. La presentadora le consultaba sobre el hecho de si tenía conocimiento de los planes de su amigo en el país asiático para tratar de dar claridad al asunto. “Iba a pasar unos días, a hacer un curso de Muay Thai. Él dijo que iba con sus amigos españoles, en plural”, confesaba ante la sorpresa de Sonsoles que hacía especial hincapié en ese plural.
Así, Viviana dejaba claro que su amigo le había mentido con alguna intención oculta. Además, ella pudo comprobar por sí misma y por los acontecimientos que se sucedieron después que ambos viajaron en solitario. “Yo nunca le pregunté quiénes eran, ya luego supimos que era solo Sancho”, declaraba al ser cuestionada por si en algún momento tuvo conocimiento de esas supuestas personas que iban a acompañarlos en el citado viaje.
En cualquier caso, la mejor amiga del médico ha querido dejar claro que tampoco conocía la orientación sexual del doctor Arrieta, ya que en muchos momentos se ha hablado de ello y de haberse constituido como uno de los posibles motivos del crimen. “Ni a nosotros nos importó ni nunca nos dijo nada”, revelaba. Además, aclaraba también que entre los pensamientos de Edwin estaban los de casarse e incluso tener hijos, ya que así se lo había hecho saber en distintas ocasiones.