Tana Rivera y Quique González de Castejón no esconden su amor y, por primera vez, hemos podido ver a la pareja disfrutar de la tradicional corrida goyesca de Ronda que organiza el padre de ella, Fran Rivera, con algo de polémica este año por un cambio de fechas que no ha terminado de gustar a Cayetano Rivera, su hermano. Tana, sin embargo, ha estado un año más en el tendido apoyando a su padre y esta vez lo ha hecho en la mejor de las compañías.

La hija de Fran Rivera, que cada vez se parece más a su abuela paterna Carmen Ordóñez, lució un vestido camisero con grandes aberturas laterales, en tono rojo coral. Era tal el calor que reinaba en Ronda que Tana, que llegó con su melena suelta, acabó recogiéndosela en un informal moño, muy natural, como es ella.

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Tana y Quique llevan varios meses de discreta relación, pero no fue hasta el pasado mes de junio cuando se dejaron ver juntos por primera vez. Fue en la plaza de toros de Las Ventas, en Madrid, ciudad en la que ambos residen. Tana vive con su madre, Eugenia Martínez de Irujo, y el marido de esta, Narcís Rebollo, presidente de Universal Music para España y Portugal. Quique, de 23 años, vive en Aravaca, es jugador profesional de hockey hierba y ha estudiado Dirección y Administración de Empresas en la Universidad Carlos III de Madrid.

Formal, con estudios y deportista, seguro que Quique González cuenta con la total aprobación de los padres de Tana que, en el fondo, lo que desean es que su hija sea feliz. Y Tana con Quique lo es.

Tana sufrió un pequeño desvanecimiento provocado por el tremendo calor de la tarde rondeña. Su propio padre así lo justificó. "Ha sido por calor, que hace mucho. Pero está bien". No es la primera vez que Tana sufre un desmayo de este tipo, motivo por el que ha sido hospitalizada en varias ocasiones a lo largo del último año.