Supervivientes: Jorge Javier evita el abandono de una desatada Violeta

La gala de expulsión de este jueves no empezaba de la manera más fácil. El presentador comunicaba una baja valiosa: Lara Álvarez se ausentaba después de haberse sentido indispuesta. A pesar de que perdía una aliada, se manejó muy bien apagando fuegos de las chispas que se encendían entre los concursantes. Y es que la convivencia está causando auténticos estragos entre ellos, mucho más que las condiciones extremas.

Jorge abordó con cada uno de los participantes los momentos que habían dado en su primera semana en la isla hasta que le llegó el turno a Violeta. Desde plató, el presentador le hacía la gran pregunta: qué había de su tonteo con Fabio. Lejos de tomárselo con humor o de quitarle hierro al asunto, la extronista estalló, revolviéndose y actuando de una manera inesperada.

Estaba desatada y, entre sollozos y con un enfado monumental, gritaba estar sufriendo una "encerrona": "No voy a consentir esta encerrona, no se me tiene que preguntar por mi novio. Por aquí no paso, me voy de aquí". Y cumplía su amenaza y dejaba a Jorge, a sus compañeros y al equipo de realización de 'Supervivientes' compuestos y sin Violeta.

Nadie sabía como reaccionar ante el gesto airado de la joven, salvo Carlos Lozano que se marchaba detrás de ella para tranquilizarla y hacerla entrar en razón. Jorge tiraba de ironía, pues consideraba desmesurada la 'rabieta' de Mangriñán. "¿Y qué hacemos sin ella? Violeta, ahora sale un avión a las 3 de la mañana para España... Acaba de producirse una de las situaciones má ridículas desde que llevo presentando 'Supervivientes", pronunciaba sin acabar de creérselo.

Finalmente, con los ánimos más calmados, Violeta conseguía sacar la auténtica razón de su arrebato. "Me quiero ir a casa porque seguro que van a estar diciendo que soy una guarra y una golfa. Me van a estar diciendo de todo. Tengo miedo", confesaba destrozada.

Jorge Javier empatizaba con la preocupación de la joven y, con el efectivo truco de darle una mínima información del exterior, conseguía que la extronista pensara con frialdad y recapacitara. Ayudado por Lila, su hermana, el presentador le comunicaba a la concursante: "Me están diciendo que tu novio Julen está hablando muy bien de ti en 'Mujeres y hombres y viceversa".

Violeta se lo pensaba mejor y decidía quedarse después de las palabras de ánimo de Vázquez: "No te preocupes porque no estás haciendo daño a nadie. Todavía tienes muchas cosas que darnos. Entiendo que estos bajones son propios de la primera semana pero tu novio está contigo y quiere que los superes. Lila te envía un beso".