Sofía toca fondo en 'Supervivientes': no puede superar la llamada de su madre

19 de mayo de 2018, 17:05

Mucho estaba aguantando. Sofía ha demostrado que a concursante de realities no le gana nadie. Es capaz de sobrevivir a casi todas las situaciones con la cabeza bien alta y una energía asombrosa. Vamos, ni pasar hambre ha conseguido calmar su carácter -que se lo pregunten a Francisco, por ejemplo-. Tan solo la llamada de su madre, Maite Galdeano, ha conseguido desestabilizarla. Desde entonces, la ex 'gran hermana' no levanta cabeza...

“Ha sido muy fuerte”. Sofía no consigue sobreponerse a la llamada de su madre. La concursante recibía, por fin, un empuje del exterior pero ha tenido el efecto totalmente contrario. Estar aislada, pasado hambre o penurias, le ha sentado mejor que haber mantenido contacto desde el exterior. La ex gran hermana se ha derrumbado y ni siquiera los consuelos de Raquel le han servido para volver a coger fuerzas.

“Tengo su voz en la cabeza”, se lamenta Sofía mientras no puede parar de llorar. La unión entre madre e hija es muy estrecha, como hemos ido comprobado a lo largo de los años. Desde que entrasen en Gran Hermano, Maite y Sofía no se han separado ni un minuto. La enfermedad que sufre actualmente la conductora de autobuses ha hecho que la superviviente esté todavía más pendiente de ella.

Raquel Mosquera, gran apoyo de Sofía en la isla, trataba de devolverle un poco de sensatez. “Lo importante es que te está viendo y está bien”. Pero ni con esas. ¿Le pasará factura en los días que le quedan en el concurso? Conociéndola, seguro que en cuanto tenga que enfrentarse a una nueva prueba, sacará todo el genio que ha demostrado. Más vale que vuelven a temblar todos.

Frentes abiertos

Sofía ha ido cerrando casi todas las posibilidades de llevarse bien con sus compañeros. Tras la unificación, se ha enemistado con la mayoría, aunque, hay que reconocer que vuelve a confiar tan pronto como se aleja. En los últimos días hemos podido ver un nuevo acercamiento entre Logan y la ex gran hermana. No tan próximo como en sus primeros días pero parece que han limado algo sus asperezas. ¿Volverán a surgir las chispas?