Cuando Josep Santacana decidió solicitar en un juzgado del condado de Miami la custodia de sus dos hijos con Arantxa Sánchez Vicario –Arantxa (9) y Leo (7)–, hubo quienes se echaron las manos a la cabeza, pero también quienes lo vieron venir. El círculo íntimo de la pareja conocía el distanciamiento que habían sufrido durante los últimos años. Dentro de él se encuentra Mónica Pont, una de las mejores amigas de la extenista.

Su presencia en la fiesta de cumpleaños de Julio José Iglesias vino como anillo al dedo para preguntarle sobre la situación actual de Vicario: “No me ha sorprendido del todo, porque hace dos años que no estaban en sus mejores momentos, pero como todas las parejas. Yo pensaba que lo superarían, porque ella apostó por su matrimonio. Le he mandado varios mensajes. Imagino que está desbordada. No puedo hablar mucho sobre su situación, hay cosas que ya sabía, pero me voy a callar”, declaró Pont.

En estos momentos tan difíciles, la modelo y actriz no ha dejado escapar la ocasión para tenderle la mano públicamente y desde la distancia: “Si es tal cual se ha dicho, ella me tiene para lo que necesite. Espero que los dos sean inteligentes y no conviertan esto en un circo mediático o en una guerra despiadada, porque los que sufren son los niños. Ellos se han querido mucho y yo lo he visto, es una pena. Quizás el amor se ha terminado, pero hay que finalizar de la mejor manera posible”, declara.

Se ha hablado mucho sobre la presión psicológica que Josep Santacana podría haber ejercido sobre Arantxa Sánchez Vicario. ¿La tendría absorbida como la familia de la extenista ha sostenido? Mónica Pont ha dado también su opinión al respecto de un tema tan complejo: “A Arantxa le ha faltado cariño. Cuando conoció a Pep le abrió su corazón y se entregó a él. No creo que la tuviese absorbida, porque ella también tenía carácter, pero quizá delegado demasiado en él”. La actriz matizaba sus palabras: “Ella era una mujer enamorada, no anulada. Ella tiene su personalidad y cuando no le gustaba algo lo decía, es una mujer hecha y derecha. (...) No es tan raro que alguien delegue en su pareja sus carreras o finanzas, sobre todo si es el padre de sus hijos. Lo único que tienen que hacer es intentar llegar al mejor acuerdo”, concluye Mónica.

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La catalana también ha desmentido que Arantxa y Josep estén separados desde hace dos años y ha dado la cara por su amiga: “No es verdad que lleven dos años separados, pero también es cierto que no han venido a Ibiza, y normalmente hacíamos un viaje con las familias". Asimismo se ha mostrado rotunda en contra de las alegaciones de Santacana para conseguir la custodia de sus hijos: "Arantxa no tiene problemas psicológicos y está perfectamente capacitada para tener la custodia de sus hijos”.

También se ha dicho que Josep Santacana podría haber dejado arruinada a Arantxa Sánchez Vicario, que se escapó a Miami tras vender sus propiedades en Barcelona y Formentera. “No, a lo mejor no tiene lo que tenía cuando jugaba, pero no está arruinada, tiene sus inversiones. Os puedo asegurar que sigue viviendo en su casa y con sus hijos, espero que se resuelva de la mejor manera posible", ha respondido. Y ha rogado al exmarido de su amiga que "si ha iniciado una guerra judicial, le pido que recapacite”.

Mónica Pont desvela algo que detestaba del exmarido de su amiga: “Él ha comentado alguna vez que vivía mejor antes de estar con Arantxa y a mí eso me dolió porque no creo que fuese así”.

El varapalo sufrido podría desencadenar que Arantxa abandone Miami. ¿Volverá a España? Por el momento, se conoce que la excampeona habría establecido contacto hace tiempo con su madre y el resto de su familia.