'Y ahora, Sonsoles' llegó a la parrilla de Antena 3 con la clara intención de informar y entretener a partes iguales. Sonsoles Ónega (45 años) analiza las últimas noticias, pero también se sienta junto a sus colaboradores para comentar lo último del corazón. Entre los últimos temas que se trataron este miércoles 11 de enero estaba el estado de salud de Alice Campello (27 años), mujer de Álvaro Morata (30 años). La joven había sufrido serias complicaciones en el que es su cuarto embarazo. Fue el propio futbolista quien dio detalles de su estado de salud. El tema no solo era abordado por los colaboradores. También había una ginecóloga en plató que explicó lo común que era lo que le había ocurrido y cómo hay que proceder para salvar la vida de la madre. Esto dio pie a que Miguel Lago (41 años) se sincerase con todos sus compañeros.
El cómico sufrió en primera persona lo mismo que el futbolista. "Lo conozco de primera mano y te lo puedo contar en un minuto y medio porque lo conté al año de ocurrir", advirtió Lago a Ónega. Con este relato, el cómico rememoró el que ha sido uno de los peores momentos de su vida.
Se refería al día en el que nació su hija Ana. "Es nuestra tercera hija y cuarto embarazo. El parto iba bien. De hecho, llamamos a su madre y nos hicimos fotos. Pero, de repente, aquello fue como cuando se desprende una manguera de un grifo. Mi esposa, Laura, comenzó a sangrar. Se la llevaron con absoluta urgencia a quirófano, donde le pusieron el balón de Bakri, que era el primero que ponían en el hospital de Arganda del Rey", relató Miguel Lago, quien aprovechó para volver a agradecer la actuación médica.
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Miguel Lago se sincera en 'Y ahora, Sonsoles'
"Fueron unas horas angustiosas", confesaba Miguel Lago a sus compañeros en plató. "Ya ha pasado el tiempo y lo puedo contar con tranquilidad porque Dios no quiso que a mi esposa le tocase en ese momento. No se murió porque no tocaba", añadió el gallego, quien trató de mantener la compostura y evitar así emocionarse al relatar un suceso tan complicado.
La mujer de Miguel Lago sufrió complicaciones en el parto
Miguel Lago se apoyó en lo que ya había contado la ginecóloga, ya que los médicos siguieron exactamente los pasos que la especialista había relatado minutos antes. "Estas cosas ocurren. Fue exactamente como lo ha contado la ginecóloga: le pusieron el balón, pasó la noche en la UCI, Ana además fue prematura, mi mujer pasó allí 48 horas. Luego, a los dos o tres días, la subieron a su habitación, y a los ocho o nueve días ya nos mandaron a todos en casa", recordó feliz por el desenlace que finalmente tuvo el suceso.
Tras haber relatado el suceso, Miguel Lago volvió a mostrarse agradecido por el desenlace, pero también confesó que fue uno de los momentos más complicados que ha vivido. "Yo es el susto más grande que he sentido. Ha sido el momento en el que sentí auténtico miedo. A mí me vino un médico y me dijo que mi mujer estaba en claro riesgo vital. Esa frase es demoledora", relataba Miguel. "Un parto no es una frivolidad, no es una fiesta en casa para hacer el cumbayá, porque pueden pasar estas cosas", añadió con rotundidad, finalizando así un relato que estremeció a sus compañeros.